La Princesa Leonor ha estado incomunicada, al igual que sus compañeros, desde que embarcó en Juan Sebastián Elcano. Casi una semana después de comenzar su aventura, ha hecho su primera parada en Tenerife, donde por primera vez hemos visto su rostro cansado. Visibles signos de no haber dormido bien, de estar agotada, algo apreciable, por ejemplo, en sus ojeras, las cuales no han extrañado teniendo en cuenta que está durmiendo en altamar. Es poco después de su llegada cuando tiene opción a llamar a su familia.
La única opción por la que sería posible que Leonor llamara en altamar
Aunque si está cerca de la costa Leonor y el resto de guardiamarinas tendrán cobertura en su teléfono móvil, no sucederá lo mismo si se alejan. Solo podrá disponer de ella si el buque en el que viaja tiene unas antenas repetidoras con conexión satélite, un dispositivo carísimo por el que es habitual recomendar que se hagan las llamadas cuando llegues a tierra. Eso es precisamente lo que le ha sucedido a Leonor, que nada más poner un pie en la isla ha podido ponerse en contacto con sus padres, los Reyes Felipe y Letizia.
Tras varios años fuera de casa y viviendo de forma independiente, está acostumbrada a no verles en el día a día, pero sí a estar comunicada con sus seres queridos. Son solo las llamadas telefónicas o las videollamadas las que permitirán a Leonor hablar con sus padres sobre sus primeros días en el buque o con su hermana, a quien también echa profundamente de menos.
Así lo explican en 'Monarquía Confidencial', donde dan detalles de esta primera toma de contacto y de la que es la primera llamada de Leonor a sus padres. Sobre todo teniendo en cuenta lo emocionante que fue su despedida a ojos de todos, un instante en el que Sus Majestades no pudieron reprimir las lágrimas. Ni Letizia ni tampoco Felipe, imagen que, por cierto, dio la vuelta al mundo.
¿De quién está acompañada Leonor en el buque?
No es para menos teniendo en cuenta que la heredera al trono estará durante seis meses a bordo de un barco en el que será una más entre sus compañeros. Deberá convivir con 188 marinos y, por supuesto, estar lejos del Pabellón del Príncipe, lugar en el que ha residido la mayoría de su vida junto a sus padres y su hermana.
Un íntimo momento, el de la llamada, que Leonor planea vivir en silencio, evitando así que curiosos puedan escuchar sus primeras confidencias a sus padres. Será en esta primera llamada cuando el Rey Felipe recordará cómo fue su embarque y padre e hija puedan comparar cómo han pasado los tiempos o si no lo han hecho tanto.
El otro plan de la Princesa Leonor en Tenerife
Leonor podrá también salir a pasear junto a sus compañeros e incluso probar alguno de los restaurantes de tierras tinerfeñas, unas rutas que suele hacer junto a compañeros de formación militar. De este modo, desconectará de sus días más intensos, donde ha debido de hacer frente a múltiples maniobras y, por supuesto, un horario muy estricto.
Antes de cruzar el océano Atlántico, Leonor ha hecho su primera parada en su camino. Justo después de llegar a Tenerife, podrá rumbo hacia Brasil, aunque durante su travesía también recorrerá otros lugares como Nueva York, Chile, Colombia, Brasil y Perú.
El 5 de junio terminará en Estados Unidos, poniendo así fin a una etapa muy dura, pero tremendamente enriquecedora para ella. Nadie lo duda. Mucho menos su padre o su abuelo, quienes como ella se embarcaron en el buque escuela de Juan Sebastián Elcano décadas atrás.
La evidente emoción del Rey Felipe al hablar sobre su formación militar
Sobre ello habló don Felipe recientemente, dejando ver cómo de importante había sido para él la formación que ahora está llevando a cabo su hija mayor. "A los sentimientos de admiración y gratitud hacia todos vosotros se suman la Reina, como todos los años, y la Princesa de Asturias, que nos acompaña por segunda vez en la Pascua Militar. Lo hace, este año, como Guardiamarina de 1o de la Escuela Naval Militar y a pocos días de embarcar en el Buque Escuela Juan Sebastián Elcano, como yo mismo hice hace 38 años, e iniciar su XCVII crucero de instrucción. Experiencia, querida Leonor, que muy seguramente quedará -como me pasó a mí (y también a tu abuelo)- entre tus mejores recuerdos de formación militar", dijo el Rey.