Quedan pocos días para que la Familia Real realice su tradicional posado veraniego con el que dan el pistoletazo de salida a sus vacaciones mallorquinas. Esta cita informativa nos ha servido a lo largo de los años para analizar la transformación de sus dos hijas de las niñas que fueron a las mujeres que son.
A través de sus gestos, estilismos e incluso de sus declaraciones, los españoles hemos visto crecer y evolucionar a la Princesa Leonor y a la Infanta Sofía. De comentar los juegos y travesuras de su infancia hemos pasado a analizar sus comportamientos más adultos y sus intereses en aspectos de moda. Les invitamos a un viaje en el tiempo a través de estos veranos inolvidables.
La inocencia de la infancia
La primera instantánea de las hermanas en Mallorca está datada en el verano de 2007. Por aquel entonces ambas eran todavía muy pequeñas y se dejaban fotografiar sobre los brazos de sus padres: Leonor no había cumplido los dos años y Sofía apenas tenía unos meses de vida.
Dos años más tarde, en 2009, Leonor y Sofía posaron ante la Catedral de Palma. Vestidas de manera idéntica, conquistaron el corazón de los españoles con el mismo vestido rosa con detalles en tela estampada y unas sandalias blancas. ¡Estaban para comérselas!
Conjuntadas pero diferentes
Fuimos conscientes de que el tiempo pasaba para las niñas con motivo del primer posado que realizaron con Felipe y Letizia convertidos en Reyes de la Nación. En 2014 Leonor ya era Heredera y Princesa de Asturias y su hermana Sofía comenzaba a mostrar su personalidad propia. Todavía compartiendo diseño, pero con colores diferentes, aparecieron vestidas por las modistas asturianas Nieves García Torres y Teresa Fernández Castro. Para aquella ocasión Sofía lució un diseño en tono rosa, mientras Leonor lo hacía en color azul. Ambas combinaron esta pieza con unas cómodas sandalias ideales para esta época del año.
Los posados de los siguientes años mostraron la evolución de las todavía niñas: por fin empezaban a vestir con atuendos diferentes. En 2015 las pequeñas llevaron una camiseta corta y bermudas, con el detalle de que la infanta Sofía llevó el mismo modelo de camiseta que su madre. Para el año siguiente optaron por looks marineros: la princesa Leonor llevó un vestido blanco y la infanta Sofía optó un vestido de rayas y sandalias plateadas.
Con la pandemia llegó la adolescencia
El año 2020 supuso cambios para todos, también en la Familia Real. Ese verano la Princesa Leonor y la Infanta Sofía aparecieron convertidas en dos jovencitas: atrás quedaron los ademanes infantiles para dar paso a otras realidades. Clásicas pero convertidas en casi-adultas empezaron a mostrar su independencia.
Aquel verano vimos a la Infanta Sofía con vendajes y muleta como consecuencia de un accidente doméstico. Aquel trastorno nos sirvió para profundizar en el carácter de ambas: fuimos conscientes de la vocación de servicio de Leonor, que no dudaba en ayudar a su hermana, y la determinación de Sofía. La hija menor de los Reyes, a pesar de estar impedida, no quiso faltar a ninguno de los planes familiares que tuvieron lugar durante aquel verano.
El año pasado nos encontramos con dos mujeres
En el verano de 2023 la isla balear nos reencontró con la Infanta y la Princesa reconvertidas en dos mujeres de bandera. En sus diferentes apariciones públicas las vimos lucir prendas llenas de color y alpargatas con cuña que estilizaban sus figuras. Las dos hermanas mostraron su independencia y empezaron a dejarse ver sin la compañía de sus padres. Cuando aparecían con ellos lo hacían mucho más relajadas y espontáneas: su personalidad propia se abría paso más allá del protocolo y sus corsés.
El propio Felipe VI habló abiertamente del paso del tiempo y sus evidencias en los veranos mallorquines: "Me acuerdo de las primeras veces. El tiempo pasa rápido", le dijo el rey Felipe VI a los periodistas congregados para el evento. Su espontánea afirmación generó un simpático gesto por parte de su hija menor.
Los planes de la familia este 2024
A finales de este mes, los Reyes y sus hijas pondrán rumbo, un año más, hacia Mallorca. Como cada año, está previsto que Felipe VI participe en la 42 edición de la Copa del Rey Mapfre -que se celebrará del 27 de julio al 3 de agosto-, y también veremos a la familia compartiendo alguna salida por la isla, además de alguna cena.
Este año la agenda de la Familia Real estará condicionada por dos factores: los Juegos Olímpicos de París y la posible presencia de atletas españoles en las finales por la lucha de las medallas, y el traslado de la infanta Sofía a Gales y de la princesa Leonor a la Escuela Naval Militar de Marín, en Pontevedra.
Es probable que tras su paso por la isla Felipe, Letizia, Leonor y Sofía viajen a un destino privado para disfrutar de unos días privados antes de retomar sus obligaciones. Se trata de una tradición que la Primera Familia repite año tras año y cuyos destinos han conseguido mantener en secreto, aunque, en ocasiones, si han trascendido algunos datos: Estambul, el Algarve portugués, la Costa Azul, las playas griegas o la eterna Roma han sido algunas de las opciones elegidas por la Familia Real.