Así, casi de un día para otro, nos encontramos con que Leonor y Sofía se han hecho 'mayores'. Son la Princesa y la Infanta, las hijas de los Reyes Felipe y Letizia, y eso marca una gran diferencia en muchas cosas, para empezar porque desde la cuna ambas han sido objeto de interés. Ahora están a punto de abordar su primer acto conjunto en solitario, sin la presencia y guía de sus padres. Este sábado se desplazarán hasta el Hayedo de Montejo (Madrid) para celebrar el Día Mundial del Medioambiente, y será curioso observarlas en un territorio inexplorado. A sus 15 y 14 años respectivamente, parece que las dos están preparadas para emprender el vuelo...
Lo que está claro es que nos ofrece una pista sobre el camino futuro. Y es que ya no van a necesitar ir siempre con los Reyes en sus apariciones públicas, lo cual abre la posibilidad de una agenda oficial para ellas como parte activa de la Familia Real. La Princesa Leonor tomó la avanzadilla debutando el pasado 24 de marzo en su primer compromiso sola (para celebrar el 30º aniversario del Instituto Cervantes). Ahora se le suma su hermana. Es significativo que lo hagan juntas, como símbolo de su unión y complicidad.
Hace tiempo que ha desaparecido la antes mano omnipresente de la Reina Letizia, sus constantes miradas e indicaciones como madre protectora con las que solía acompañarlas en sus contadas salidas públicas a lo largo del año.
Ahora las chicas van más por libre. Lo pudimos apreciar durante las últimas vacaciones en Mallorca, en un verano marcado por la pandemia. En su primera aparición en la localidad de Petra, Leonor y Sofía caminaban por separado en algunos momentos, y el foco se centraba en la ternura con la que la Princesa ayudaba a una lesionada Sofía, que iba con muletas. Ellas se las arreglaban solas.
Los tacones representan el símbolo más visible del crecimiento de Leonor. En todos los sentidos. Los llevó por primera vez en los Premios Princesa de Asturias de 2020 y desde entonces ha repetido en varias ocasiones, entre ellas en su debut oficial en solitario. La última vez que los ha lucido ha sido para su reciente Confirmación. Vestida de azul intenso (su color fetiche) y con sandalias destalonadas de Carolina Herrera, la actitud de Leonor ante los medios era mucho más suelta y relajada. Posa, responde, saluda, no deja de sonreír... Se nota el rodaje que la heredera ha ido adquiriendo en los últimos tres años al asumir progresivamente más tareas institucionales.
UN ESTILO MÁS ADULTO Y DIFERENCIADO
Se ha quitado las trencitas y se ha ondulado la melena, también se la ha cortado dando una imagen más adulta... Para ir a la ópera con sus padres y su hermana optó por un llamativo look roquero, con cazadora de cuero y botas de caña, lo que nos da ideas sobre lo que le gusta en privado, cuando es 'ella misma'. Lo mismo puede decirse de la Infanta Sofía, cada día con más estilo propio (moderna y atrevida), bien diferenciado del de su hermana mayor y con una legión de adeptos.
No conocemos a su pandilla de amigos (la mayoría entre sus compañeros del colegio Santa María de los Rosales), pero sin duda existen. De ellas destacan los que las conocen que son cercanas, educadas y simpáticas en las distancias cortas. Quizás muy pronto las veamos saliendo, yendo al cine o algún concierto por su cuenta. Es lo natural en jóvenes de su edad que empiezan a salir al mundo.
Antes de su Confirmación, Leonor acudió con sus compañeros a un retiro espiritual en Guadarrama. Y con su hermana ha ido dos veranos a un campamento en Estados Unidos. La Princesa Leonor incluso se marchará en septiembre a estudiar el Bachillerato a un internado de Gales. Será el momento decisivo; lejos de sus padres y de su hermana, mientras se abre a nuevas experiencias enriquecedoras.
Aunque sus padres han procurado mantenerlas alejadas del bullicio público y que su infancia fuese lo más 'normal' dentro de sus posibilidades, lo cierto es que nos encaminamos hacia un punto de no retorno: Leonor y Sofía ya son dos adolescentes que comienzan a reclamar su sitio. Y todo ello ante la mirada (seguramente nostálgica) de sus padres, que inevitablemente ven cómo sus 'niñas' se les escapan de las manos. Todos estos pequeños gestos apuntan hacia ello.
Este sábado se sumarán a un grupo de 35 jóvenes para el cierre de la campaña internacional titulada 'Un árbol por Europa', en el Hayedo de Montejo, un espacio natural protegido situado en la Sierra del Rincón en Madrid. La mayoría de estos tienen entre 14 y 16 años y vienen de diferentes países de la UE y de las Escuelas Embajadoras del Parlamento Europeo. Leonor y Sofía plantarán seis árboles y así ayudarán a preservar y concienciar sobre el medioambiente, en una iniciativa en la que siguen los pasos 'eco' de su abuela la Reina Sofía.