Victoria Federica de Marichalar y Borbón se ha convertido este año por méritos propios en uno de los nombres más sonados de la Familia Real Española. Su llegada a la mayoría de edad, sus primeros escarceos amorosos y una faceta fashion que no pasa casi nunca desapercibida son solo algunos de los motivos que justifican su influencia. Las semanas previas a su 18 cumpleaños fueron generadoras de actualidad informativa en torno a todos los entresijos de la que iba a ser su gran fiesta de cumpleaños. Una celebración que nunca llegó, lo mismo que la idílica puesta de largo que todos habíamos imaginado para ella. La hija de la infanta Elena nos ha dejado a todos con un palmo al no festejar ninguna.
Victoria Federica nos ha dejado con las ganas de fiesta
Lo que iban a ser dos fiestas de órdago (su cumpleaños y puesta de largo) han quedado reducidas a una mera ilusión que jamás han llegado.
Una oportunidad perdida
Había muchísimas ganas de ver a Victoria Federica en un acto de este calibre para poder hablar de su estilo propio, que tantos elogios ha recibido. La nieta de los eméritos ha triunfado al apostar por un sello fashion que quizás diste mucho de lo que se esperaba de un miembro de la Familia Real, pero ella lo hace a la perfección.
Reencuentro frustrado
Tanto el cumpleaños como la puesta de largo habrían sido dos oportunidades muy buenas para poder ver la reaparición de la infanta Elena junto a Jaime de Marichalar, ocho años después de obtener su divorcio.
Victoria Federica y Gonzalo Caballero
Su estrechísima relación (ya sea de amistad o sentimental) podría haberse 'oficializado' en alguno de los dos eventos. Sea como fuere, su conexión sigue muy viva y va viento en popa.
Un cumpleaños anunciado
Todo parecía estar listo para celebrar la mayoría de edad de Victoria Federica. Una gran fiesta en la discoteca Teatro Barceló del centro de Madrid le esperaba.
Ausencia sonada
De hecho, varios fotógrafos se agolpaban en las puertas de la antigua discoteca Pachá para captar una imagen de la joven, una imagen que nunca llegaría. Allí no se presentó nadie.
El motivo
Froilán parecía ser el encargado de preparar esa fiesta. Su hermana tenía otros planes en la cabeza, sobre todo porque ese lunes comenzaba las clases en el St. Georges de La Moraleja y una fiesta unas horas antes le habría descuadrado bastante los horarios.
Su única celebración de cumpleaños
Lo único que hizo Victoria Federica por su 18 cumpleaños fue una comida con su madre y su hermano Froilán en el palacio de la Zarzuela, invitados por sus abuelos doña Sofía y don Juan Carlos.
La puesta de largo que nunca llega
El otro gran acto que se esperaba con emoción era la puesta de largo de Victoria Federica. El 9 de noviembre parecía la fecha definitiva.
Antes había triunfado en la de su amiga Tana Rivera con un estilismo espectacular
Su padre lo descartó
El duque de Lugo desmentía el pasado 5 de noviembre, en una conversación con Informalia, los rumores de celebración: "Ni hay puesta de largo, ni hay fiesta. Nada".
Tradición familiar
Hacer una puesta de largo es algo que ya no se estila dentro de la monarquía española. La última la protagonizó Pilar de Borbon, en 1954 y en Lisboa (Portugal. En España, las infantas Cristina y Elena hicieron algo similar en 1983 que llamaron 'fiesta de la juventud'.Planes en familia
Hace pocos días estuvo con su madre, tía y primos viendo 'El Músico', en Madrid.
Gonzalo y Victoria Federica, jugando al despiste
Y así fue como Victoria Federica nos dejó con las ganas