La madre del Rey Felipe ha viajado hasta el norte de España, concretamente a Vitoria, para reunirse con los voluntarios del Banco de Alimentos.
La Reina Sofía ha dado pistoletazo de salida a la semana haciéndose cargo de un compromiso dotado de un gran significado. Para ello, la madre de Felipe VI ha viajado hasta Álava y concretamente hasta el Banco de Alimentos de Vitoria, su capital, para encontrarse con todos y cada uno de los voluntarios de esta organización.
Ataviada con un conjunto basado en un pantalón gris antracita de pernera ancha, una blusa estampada y una blazer negra y aterciopelada, la Reina Sofía se ha dejado ver en el norte del país en torno a las 16:30 horas de la tarde. Pero no lo ha hecho sola. Lo ha hecho acompañada por la consejera de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales, Nerea Melgosa; el diputado general de Álava, Ramiro González; la alcaldesa de Vitoria-Gasteiz, Maider Etxebarria; y el presidente del Banco de Alimentos de Álava, Daniel Fernández.
La abuela de la Princesa Leonor ha ejercido como perfecta representante de la Fundación Reina Sofía. Cabe destacar que su papel dentro de esta organización es el de presidenta ejecutiva, por lo que quién mejor que ella para “conocer de cerca la realidad” del Banco de Alimentos de Vitoria y su funcionamiento “en un momento tan delicado socialmente”.
Una vez se ha fotografiado junto al resto de rostros conocidos en los aledaños del edificio, doña Sofía se ha sumergido de lleno en una reunión de unos 40 minutos de duración. Las autoridades de la Asociación Banco de Alimentos de Álava y los representantes de la Federación Española de Bancos de Alimentos han querido dejar clara “su implicación y colaboración con los bancos de alimentos de toda España”. Un objetivo con el que la esposa de Juan Carlos I está totalmente de acuerdo, y así lo deja entrever siempre que acude a eventos de esta índole.
Cuando la charla en cuestión ha llegado a su fin, la suegra de la Reina Letizia ha tenido oportunidad de recorrer las instalaciones del Banco de Alimentos mencionado. Allí ha conocido de primera mano la labor de sus voluntarios, que le han dado algunas claves sobre almacenaje y cómo cargan con comida una furgoneta que después hace repartos por distintos puntos de la provincia vasca.
Para poner el broche de oro a su visita a Vitoria, doña Sofía se ha fotografiado también con los trabajadores con la mejor de sus sonrisas. Una vez más, la Reina ha hecho gala de su simpatía y de su saber estar, motivo por el que es tan sumamente querida por muchos tanto dentro como fuera de nuestras fronteras.
El objetivo por el que la Reina Sofía trabaja sin descanso
El apoyo de la Reina Sofía es clave, sobre todo teniendo en cuenta que no ha sido el mejor momento ni para el Banco de Alimentos de Álava ni para otras organizaciones de este tipo en España. Esta ONG atiende en torno a cinco mil personas en la actualidad y 1.500 familias, todas ellas caracterizadas por el escaso poder adquisitivo con el que cuentan y que destinan al pago del alquiler de la vivienda y a sus facturas.
Sin embargo, su labor se ha visto terriblemente afectada por la reciente subida de precios. Por ello, a sus trabajadores no les ha quedado más remedio que reducir los productos básicos que ofrecen a las personas que más lo necesitan y limitar su entrega. Entre ellos están los huevos, las patatas, la leche, la carne, el aceite y los frutos secos.
Con su visita a Álava, doña Sofía ha apelado tanto a la sensibilidad como a la solidaridad no solo de la sociedad vasca, sino también de la del resto de puntos de España. Su objetivo es el de ofrecer un sustento básico alimenticio y otros productos a la población que permanece en riesgo de exclusión social, para que así sus vidas no sean tan sumamente difíciles y puedan tener las mismas oportunidades que el resto de ciudadanos. Una tarea en absoluto sencilla para la que la Reina trabaja sin descanso y por la que acude a eventos de este calibre siempre que tiene oportunidad y que su agenda oficial se lo permite. De esta manera, además, otorga una visión mucho más cercana de la Casa Real en sí, sobre todo ahora que vive una nueva era.