Hoy es un día especial para la Familia Real. Al fin, tras casi dos años de separación a raíz de la marcha del Rey Juan Carlos a Abu Dabi, sus miembros vuelven a reunirse. Una esperadísima cita en el palacio de La Zarzuela, para la que sin embargo hay más incógnitas que certezas. La principal reside en quiénes asisten a este reencuentro, qué nombres propios se sientan a la misma mesa a comer. En definitiva, quién recibe al monarca emérito en el que fue su hogar durante casi 60 años.
Según el comunicado que hizo público la Casa Real la semana pasada, Don Juan Carlos viajaría este mismo lunes a Madrid procedente de Sanxenxo, adonde llegó el pasado jueves por la tarde para participar en una regata. Con ello daban por zanjadas las especulaciones respecto a los planes del esperado regreso del emérito en España después de 21 meses de retiro en Emiratos Árabes Unidos.
En la nota se especificaba que este lunes el emérito se trasladaba a la capital "para estar con Su Majestad el Rey, con Su Majestad la Reina Doña Sofía y demás miembros de su familia en el Palacio de La Zarzuela". Unas palabras que dejaban un margen de flexibilidad para la reunión a falta de varios días para la misma. Lo que ya en ese momento llamaba la atención es que no se mencionara expresamente el nombre de la Reina Letizia.
El hecho es que el Rey Juan Carlos ha despegado hoy pasadas las 8 y media de la mañana del aeropuerto de Vigo camino de Madrid. Allí le han despedido Pedro Campos, su gran amigo y anfitrión durante estos días en Sanxenxo, y la esposa del regatista, Cristina Franze. Un jet privado lo ha traído a la capital, donde ha aterrizado una hora después. Alrededor de las 10 de la mañana ha entrado de nuevo en La Zarzuela. Al ser preguntado sobre lo que esperaba una vez dentro, ha dicho: "Besos y abrazos".
Lucía un traje de chaqueta azul marino y corbata carmesí. Un atuendo mucho más formal que el que lógicamente le hemos visto en Sanxenxo, donde fundamentalmente se ha mostrado como un deportista de la vela.
Puestos en contacto con la Casa Real, no han podido ofrecer ninguna información adicional al respecto, ya que consideran este encuentro dentro del ámbito privado de la Familia Real. Tampoco parece que, de momento, se vaya a facilitar alguna fotografía de este esperadísimo reencuentro.
Con ello se resolverían todas las dudas sobre los presentes, y en especial en lo referido a la Reina Letizia. De todos es sabido que la consorte y su suegro han mantenido una relación más bien fría a lo largo de los años. Por otro lado, resultaría un poco extraño que la 'titular' de La Zarzuela en estos momentos se ausentara de su propia casa en un momento tan importante. Tanto la consorte como su esposo han despejado su agenda este lunes.
Según afirmaba hace unos días el cronista Jaime Peñafiel en el programa 'Ya es mediodía', este daba por seguro que Doña Letizia no iba a estar en la comida celebrada en La Zarzuela. Algo a lo que Sonsoles Ónega, discreta amiga de la Reina, se limitaba a replicarle, con una expresión incrédula, si lo podía afirmar con tal rotundidad.
En el capítulo de "demás" familiares cabría esperar la presencia de su nieta la Infanta Sofía; su hija la Infanta Elena y quizás los dos hijos de esta, Froilán y Victoria Federica de Marichalar, a quienes tan unido está. También podría asistir la Infanta Margarita, hermana menor del monarca, y puede que algunos sobrinos más como Simoneta Gómez-Acebo y María Zurita, entre otros.
Quizás acudan también otros nietos del monarca, como Juan Urdangarin, que ahora vive en Madrid. Pablo Urdangarin se daría ya por cumplido con el tierno abrazo que protagonizaron durante el partido de balonmano al que el emérito le fue a ver jugar en Pontevedra. La Infanta Cristina habría regresado ya a Ginebra (Suiza) tras unos días en la capital, pero todo es posible. Más duda provoca la Princesa Leonor, quien tendría que viajar desde su internado en Gales en plenos exámenes finales.
Aparte del cara a cara entre padre e hijo, es de especial importancia el reencuentro con la Reina Sofía, su esposa desde hace 60 años. La soberana ha regresado a España tras pasar varios días en Miami atendiendo compromisos con el instituto que lleva su nombre. Pero ha llegado a tiempo para saludar a su esposo y de nuevo mirarse a los ojos. Pese a todo lo sucedido entre ellos, seguro que la emoción está servida.
El mismo comunicado indicaba que esta misma tarde "Su Majestad el Rey Don Juan Carlos emprenderá viaje de regreso a Abu Dabi, donde ha fijado su residencia de forma permanente y estable. Esta visita se enmarca en el deseo de Su Majestad el Rey Don Juan Carlos de desplazarse con frecuencia a España para visitar a la familia y amigos, y organizar su vida personal y su lugar de residencia en ámbitos de carácter privado". Así que no pernoctará en La Zarzuela.
Haciendo balance, esta primera visita ha servido para romper el hielo y empezar a retomar una cierta normalidad del Rey Juan Carlos ante la opinión pública.