Fue en el año 2014, cuando llegó el Rey Felipe al trono tras la abdicación de su padre, Don Juan Carlos, cuando los miembros de la Familia Real se vieron reducidos y tan solo estaba compuesta por los monarcas salientes (Don Juan Carlos y Doña Sofía), por los Reyes de España (Don Felipe y Doña Letizia), así como por la Princesa de Asturiasy su hermana, la infanta Sofía. Esto se traduce en que tanto la infanta Cristina como la infanta Elena quedaban excluídas como miembro de la Familia Real española.
Las dos hijas de los eméritos dejaron de formar parte de la Familia Real para ser únicamente consideradas como familia del Rey de España. Aún así, el ojito derecho de Don Juan Carlos (la infanta Elena) con el paso de los años se ha ido ganando el cariño de los españoles. Aunque no tiene ningún papel de representación de la Institución de la Corona, siempre ha sabido defender de la manera correcta y sin entrar en ninguna polémica.
La infanta Elena, ajena a todas las polémicas de su alrededor
Aunque lo cierto es que este último año ha estado en boca de todos debido a los conflictos en los que sus hijos, Victoria Federica y Froilán, tanto como su padre, Don Juan Carlos, se han visto envueltos, la infanta Elena ha sabido mantenerse en su sitio y no entrar en ningún tipo de polémica. Ha querido dar ejemplo y este 2020 ha sido el año en el que más se ha acercado a los españoles, ha mostrado su lado más solidario y ha estado más cercana que ningún otro miembro de la familia del rey.
La hermana de Felipe VI está siguiendo la estela de su madre, Doña Sofía, intentando evitar que su nombre se le relacione con cualquier polémica. De hecho, cuando su nombre resuena con fuerza ella intenta no alimentar ese revuelo y siempre tiene un perfil bajo sin ganas de estar en el punto de mira. A pesar de sus deseos, este año lo ha tenido más complicado que ningún otro por culpa de sus seres familiares más cercanos. Por un lado, cada una de las polémicas en las que su hija, Victoria Federica, ha estado presente saltándose las restricciones y normas implantadas por culpa del coronavirus.
Aunque su hija haya estado en el ojo del huracán, la hermana del Rey no ha querido ni siquiera salir a defenderla de manera pública. Ha preferido guardar todo de puestas para dentro de su casa, aunque todo esto salte a la escena pública. Algo que también ha ocurrido con su padre, que se encuentra en Abu Dabi y que hace unas semanas pagó su deuda con Hacienda.