Mientras que los Reyes, Felipe y Letizia, están preparando su próxima visita a Valencia tras su tensa visita a Paiporta, el Rey Juan Carlos I se desmarca de cualquier polémica y recibe un homenaje en el que SEMANA ha podido ser testigo en exclusiva. Ha sido este viernes en la noche cuando Dubai se vestía de gala para acoger uno de los eventos más esperados del año: el exclusivo Opera Ball, protagonizado por el legendario tenor Plácido Domingo, la soprano Sonya Yoncheva, y la emblemática 'Vienna Strauss Festival Orchestra'.
Este evento, que combinó arte, glamour y emoción, congregó a personalidades y celebridades internacionales que habían anticipado esta velada durante más de un año. Sin lugar a dudas, era uno de los eventos más esperados de los Emiratos Árabes y nadie quería perdérselo. Sin embargo,lo que nadie se imaginaba cuando compró sus entradas que el mismísimo Rey Juan Carlos I iba a vivir uno de los momentos más emocionantes de los últimos años.
El Rey Juan Carlos, muy emocionado, es homenajeado en la Opera de Dubai
Como veníamos diciendo, el momento más conmovedor de la noche fue el homenaje al Rey Don Juan Carlos. Quien, visiblemente emocionado, agradeció al público tras recibir una ovación de más de cinco minutos de pie. “Es un gran honor para mí estar aquí con todos ustedes y agradezco mucho este reconocimiento” pronunció Don Juan Carlos en inglés después de recibir una pequeña escultura y un ramo de flores, al mismo tiempo, se proyectaban en la pantalla imagines del rey Juan Carlos en diferentes momentos de su vida, incluso con el uniforme militar. SEMANA ha tenido acceso en exclusiva a las imágenes que recogen la emoción del emérito tan solo unos meses después de que se filtraran sus imágenes con Bárbara Rey y, días después, unos audios.
El evento reunió a una audiencia internacional excepcional, compuesta por asistentes de más de 100 países, incluidos residentes del emirato y otros que viajaron específicamente para la ocasión. Entre los invitados españoles, se encontraba Kemel Kharbachi, fundador de 'EOS X SPACE', la cuarta compañía más importante del mundo en turismo espacial, cuya base de lanzamiento está actualmente en construcción en Emiratos Árabes Unidos, quien acudió acompañado de su novia, la modelo Irena Maslanka.
El momento más simbólico de la velada fue la fusión cultural que cerró el evento, representando un puente entre las tradiciones musulmana y cristiana. Un tenor árabe y una soprano cristiana unieron sus voces en una interpretación única y emocionante que combinó el 'Ave María' con 'Aṣṣalá' (la llamada a la oración musulmana). Esta colaboración no solo fue un colofón artístico, sino también un poderoso mensaje de unidad y entendimiento entre culturas, dejando una huella imborrable en los asistentes.
El Opera Ball, celebrado en el corazón de Dubai, reafirmó la ciudad como un epicentro cultural y un puente entre las tradiciones europeas y la comunidad internacional que reside en el emirato. Una noche inolvidable que quedará grabada como un tributo al arte, el liderazgo y el espíritu global y, sobre todo, en la memoria del Rey Juan Carlos I, quien recibió ese homenaje tras unos meses complicados a consecuencia de las filtraciones.
Los planes del Rey Juan Carlos I, más allá de Dubai: su cena con sus nietos
A pesar de que el Rey Juan Carlos I tiene su residencia fijada en Dubai, son constantes las visitas que hace a nuestro país o incluso a Europa. Hace tan solo unos días, conocimos que el emérito se había reunido con sus nietos, Irene y Miguel Urdangarin, en un exclusivo club de Londres, el Oswald's. Una visita que no estuvo exenta de polémica, ya que precisamente tuvo lugar durante los días que se vivió una gran catástrofe en Valencia por culpa de la DANA.
Precisamente, el mismo fin de semana que el emérito disfrutaba de una exclusiva cena junto a los hijos de la infanta Cristina en este local, al que solo se puede acceder mediante invitación de un miembro, Felipe y Letizia hacían frente a uno de los momentos más complicados de su reinado. Los Reyes se desplazaron hasta Paiporta para conocer de primera mano las devastadoras consecuencias que había dejado la DANA tras su paso por la Comunidad Valenciana. Una visita que no estuvo exenta de polémica, pues les recriminaron su presencia, les insultaron y les lanzaron objetos y barro. Unas escenas sin precedentes que dan cuenta de la rabia y el dolor que sienten los ciudadanos afectados por la tragedia.
A pesar de que los ánimos estaban muy caldeados, los Reyes quisieron seguir adelante con su visita, escuchando a las personas que han perdido su casa, sus enseres o incluso a familiares, intentando calmar los ánimos. Unos Reyes muy cercanos, que hicieron que su actitud fuera aplaudida por medios de comunicación de todo el mundo que, inevitablemente, se hicieron eco de los tensos momentos a los que tuvieron que hacer frente. Mientras tanto, Juan Carlos I, ajeno a todo ello, disfrutaba de una exclusiva cena.