Los Reyes ya están de vuelta tras las vacaciones de Navidad "secretas". Ayer domingo, 6 de enero, reaparecían para cumplir con su primer acto oficial del año presidiendo la Pascua Militar en el Palacio Real de Madrid. Tiros largos, solemnidad... Para empezar no está mal. Sin embargo, por la tarde su rumbo giró 180 grados. Fuera etiquetas y protocolos. Era el día de otras Majestades, los Reyes Magos, y había que celebrarlo...
El coche con la Familia Real
Por la tarde, los Reyes y sus hijas, Leonor y Sofía, se montaron en su vehículo privado y pusieron rumbo a la casa de Jesús Ortiz, padre de la Reina, quien reside en la localidad madrileña de Pozuelo de Alarcón.
Don Felipe conducía el vehículo con distinción eco
Como es habitual en sus desplazamientos privados, el Rey se puso al volante. También le vimos hacerlo llevando a sus hijas al colegio Santa María de los Rosales en el reportaje que Casa Real facilitó hace justo un año. Por cierto, su coche muestra en la luna delantera la peqatina con la letra C, que es el distintivo medioambiental, que sirve para controlar el acceso al centro de Madrid. Este tipo la llevan turismos y furgonetas ligeras de gasolina matriculadas a partir de enero de 2006 y diésel a partir de 2014.
Tono informal de la visita
En contraste con lo que habíamos visto por la mañana, Felipe y Letizia 'aparcaron' la gran etiqueta. El Rey se quitó su uniforme militar y la Reina se desprendió de todas las capas de maquillaje y peinado. Del moño a la melena suelta y con el rostro casi desnudo, muy natural. Al fin y al cabo iban a pasar el resto de la jornada en la casa paterna, y hay confianza.
La ilusión de las niñas
En los asientos traseros iban sentadas Leonor y Sofía. Como es lógico, el día de Reyes es uno de los más especiales del año para los pequeños. La Princesa y la Infanta, con 13 y 12 años respectivamente, no son ajenas a ello y suponemos que tras descubrir las sorpresas que les tenían preparadas en su casa de La Zarzuela, también estaban deseosas de descubrir si en la casa del abuelo materno les habían dejado algo...
Sofía, muy sonriente
Sofía, quien al igual que su hermana mayor iba peinada con una coleta, no podía ocultar la ilusión del momento en forma de gran sonrisa. Los flashes de los fotógrafos la iluminaron mientras sus padres saludaban desde los asientos delanteros. Si se han portado bien, seguro que les esperaban algunos regalitos.
La Reina, muy relajada
Letizia saludó a los fotógrafos desplazados a Pozuelo en una fría tarde de enero en la capital. Después de disfrutar de unos 10 días de vacaciones, parte de ellos en un destino secreto que el gran público desconoce, toca volver a la rutina, pero al menos descansada y con buen humor.
Un coche muy eco
Los Reyes y sus hijas cumplieron así un año más con una tradición de la familia: el roscón se toma siempre en casa de Jesús Ortiz y su esposa, Ana Togores. Una manera de 'repartirse' entre ambas familias y que todos puedan compartir la alegría de las fiestas.
Comienza el año para los Reyes
Los Reyes encaran ya el año 2019 con el buen sabor de boca dejado tras las navidades y doce meses por delante llenos de retos.