Los Reyes, Felipe y Letizia, tenían que cumplir durante la tarde de este jueves con un evento muy especial para ellos. Y es que iban a estar presentes en la inauguración de la temporada 2021/2022 del Teatro Real. Como hacen cada año, los Reyes iban a acudir juntos, pero el hecho de que hayan tenido que viajar a La Palma, Islas Canarias, para visitar a los afectados por las consecuencias devastadoras que ha dejado la erupción del volcán les ha impedido asistir.
Sin embargo, han dejado el testigo a la mejor representante, Doña Sofía. La Reina emérita ha sido la encargada de sustituir a los Reyes en este evento oficial. Ha tenido la suerte de acudir a ver la representación de la ópera 'La Cenerentola', de Gioachino Rossini. Doña Sofía ha sacado sus mejores galas para asistir a este evento tan especial para la Familia Real.
Vídeo: Europa Press
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Doña Sofía ha asistido a este evento oficial con un vestido tipo abrigo de manga larga con colores rojos, dorados y plateados. La Reina emérita ha vuelto a lucir sus característicos collares de perlas, zapatos de tacón y bolso en color ocre. No ha olvidado su mascarilla, obligatoria todavía en lugares cerrados y públicos.
Doña Sofía ha lucido sus mejores galas para sustituir a los Reyes
Doña Sofía no ha sido el único rostro conocido que ha acudido a este evento en el Teatro Real. Son muchos los que se apuntan a este plan cada año para dar el pistoletazo de salida a la nueva temporada de la ópera. Hemos visto a Eugenia Silva, Carmen Lomana, José María Aznar y su mujer, Ana Botella, Lorenzo Caprile, Inés Sastre, entre otros.
Felipe y Letizia siguen de cerca lo ocurrido en La Palma
Los Reyes siguen visitando las zonas más afectadas por las consecuencias que está dejando el paso de la lava por La Palma, que se está llevando todo a su paso. Felipe y Letizia han viajado hasta allí para conocer de primera mano la situación por la que pasan las 6.000 personas que han tenido que abandonar sus casas y mostrarles su apoyo. Han estado acompañados de Pedro Sánchez, presidente del Gobierno. La primera parada ha sido el Fuerte de Breña Baja, un acuartelamiento militar que está sirviendo como lugar de acogida para los afectados.
En el patio del cuartel han tenido los primeros contactos con las personas desplazadas, comenzando el saludo con un grupo de ancianos en sillas de ruedas. Don Felipe y Doña Letizia han intercambiado unas palabras de consuelo con ellos en estos momentos tan duros y se han interesado en cómo y dónde están pasando estos días.
Se estima que alrededor de 200 casas han sucumbido ya bajo la lava, que deja a su paso un rastro de destrucción desolador ante el que nada se puede oponer. Solo queda ofrecer amparo y herramientas de futuro a todos aquellos que tuvieron que salir corriendo prácticamente con lo puesto y que lo han perdido todo.