Tras completar su primera travesía desde Cádiz a las Islas Canarias, la Princesa Leonor se encuentra en alta mar desde el pasado 23 de enero, a bordo del buque escuela Juan Sebastián Elcano. El que será su hogar durante cinco meses (seis en el caso de sus compañeros) la llevará a recorrer ocho países y surcar dos mares hasta junio, momento en el que regresará a España, ya como una guardamarina capaz y experimentada.

Siguiendo con el férreo cronograma, está previsto que la heredera atraque en Brasil el próximo 14 de febrero, tras cerca de un mes surcando el océano Atlántico y sin la posibilidad de poner un pie en tierra firme. Una hazaña que tendrá su punto álgido con el bautismo de la Princesa Leonor y el resto de 'novatos'. Se trata de una gran tradición marina, con fiesta a bordo, incluida, que coincide con el paso de la embarcación por el ecuador.

Cerca de un mes en alta mar: el gran reto marítimo de la Princesa Leonor

Poco o nada ha trascendido de la vida a bordo del buque escuela Elcano. Una experiencia única con la que la Princesa Leonor sellará su paso por la Armada y pondrá fin a su formación castrense en esta rama del Ejército. La hija mayor de los Reyes Felipe y Letizia está desempeñando sus labores como una guardamarina más, sin privilegios ni tratos de favor, demostrando su capacidad para afrontar los retos de la vida en alta mar. Según han desvelado fuentes de Zarzuela, la joven de 19 años "se encuentra pleno rendimiento en la cubierta del buque escuela, navegando a toda vela para cruzar el Atlántico rumbo a América", recoge 'Monarquía Confidencial. 

En estos momentos, Leonor está inmersa en la etapa de tránsito más larga de su travesía a bordo de Elcano de 22 días de duración, en la que no tocará puerto hasta atracar en Salvador de Bahía, coincidiendo con el día de San Valentín. Una experiencia única para la Princesa de Asturias por la que ya pasó su padre, Felipe VI, y antes de este, su abuelo, Juan Carlos I. No hará el camino de regreso a casa, como si sucederá con el resto de sus compañeros, dentro de Elcano. En su caso, está previsto que coja un vuelo desde Nueva York a España a en el mes de junio, previo paso un merecido descanso antes de integrar las filas del Ejército del Aire, última etapa en su formación castrense. 

La Princesa Leonor junto a sus compañeros en Las Palmas de Gran Canaria

La Princesa Leonor junto a sus compañeros en Las Palmas de Gran Canaria

Gtres

El hito de la  Princesa Leonor en alta mar: el esperado y divertido bautismo a cargo de Neptuno

La dureza de la experiencia que está viviendo la Princesa Leonor, con cronogramas de estudio y maniobras bien delimitados y escalas en tierra breves y completamente definidas, no está exenta de momentos de ocio, diversión y disfrute entre compañeros. Uno de ellos y, quizá, el más esperado por todos los tripulantes, es el bautismo de los 'novatos', que coincide con el paso del buque escuela Juan Sebastián Elcano por el ecuador, el círculo máximo perpendicular al eje de rotación del planeta Tierra.

Se trata de unas de las ceremonias navales más icónicas de esta travesía en la que el dios Neptuno aparece para bautizar a los nuevos, entre ellos y como no podía ser de otro modo, a la futura reina de España. 

Como ha desvelado Paloma Barrientos en 'Vanitatis', un miembro de la tripulación se disfraza, se sienta en su trono con su tridente y se acompaña de una comitiva de marineros, guardiamarinas y oficiales, también vestidos como corte del dios marino.

"Neptuno y los suyos ponen el barco patas arriba, algo que consiste en el cambio de galones. Por ejemplo, el cocinero se apropia de los del oficial, este de un marinero de máquinas, y la guardiamarina Borbón Ortiz de cualquier otro. Durante un par de horas tienen que hacer las tareas propias del cargo al que han optado por ese intercambio organizado por el rey del mar y sus súbditos", destapa la periodista. 

El tributo que tendrá que pagar la Princesa Leonor a Neptuno por su bautismo

La ceremonia de bautismo de la Princesa Leonor a bordo de Elcano finaliza de un modo muy particular, cuanto menos. Los oficiales del buque escuela llaman uno a uno a los novatos para bautizarles a base de rociarles un líquido a base de aceite y colorante, señalan desde el citado medio. Los bautizados, entre los que está la hija de los Reyes Felipe y Letizia, tendrán que pagar un tributo y ofrecer un mechón de pelo que un personaje de la comitiva de Neptuno les corta previamente.  

Esta ceremonia y paso por la línea imaginaria del ecuador es un día festivo en Elcano, con menú especial en cubierta para todos los tripulantes de la embarcación, aclara Paloma Barrientos. Es habitual que comprenda un aperitivo, denominado como 'meridiana', paella o, incluso, sardinada. Tras esta jornada de fiesta y diversión, Neptuno se despide de sus nuevos súbitos y con su marcha vuelve el orden al navío.