Es divertida, risueña, optimista y positiva. Bonita por fuera, pero mucho más dentro. Por suerte, en ella no hay asomo de rencor tras haber sido víctima durante años de acoso escolar, gracias a una familia que siempre la ha apoyado y le ha reforzado la autoestima dañada. Quizá por ello, Vanesa Romero (46) se creó desde niña un mundo interior para dar rienda suelta a su creatividad.
Así, tras saltar a la fama por su faceta de actriz, donde ha cosechado éxitos como la serie 'La que se avecina', la alicantina está probando suerte en el mundo de la dirección, donde acaba de estrenar su segundo corto, 'Sexo a los 70', y en el de la literatura con su nueva novela, 'A solas conmigo' (SUMA).
"No tengo pareja en este momento. Estoy en una época muy tranquila, en paz, disfrutando mucho de estar conmigo, con mis amigos, mi familia, mis animales y mi trabajo", nos cuenta la actriz alicantina.
Foto: Alberto Bernárdez.
Víctima del acoso escolar
¿Qué edad tenías cuando empezaste a sufrir bullying?
Tendría unos siete años, era una niña estudiosa y aplicada; sentía que me hacían el vacío, que me aislaban, que no encajaba y comencé a sufrir acoso. Incluso, me llegaron a tirar por las escaleras... En ese momento, no entendía qué estaba pasando, porque era muy pequeña y no tenía herramientas para gestionarlo. Me preguntaba: "¿Pero qué hago mal? ¿Qué tengo que no encaja? ¿Por qué?".
A los 11 años te cambiaron de colegio y siguió pasando...
Sí, y fue aún peor, porque encima entré con el curso empezado y era la nueva. La autoestima se ve mermada, porque no entiendes por qué te está pasando eso. Lo bueno es que se lo contaba a mis padres y ellos intentaban solucionarlo, pero eran otros tiempos y era difícil.
¿Cómo lo superaste?
Con el apoyo de mis padres y, al tiempo, fui a terapia y allí me ayudaron a poner nombre a las cosas y a entender.
¿Estas heridas se curan?
Forman parte de ti y puede haber momentos en los que se te abran, pero ya tienes herramientas para gestionarlo. Yo estoy muy bien y el mensaje es que de esto se sale y puedes tener una vida plena.
"Soy una miedosa valiente porque creo que para saber si algo se te da bien, hay que experimentarlo, aunque tengas miedo", asegura Vanesa Romero.
Foto: Alberto Bernárdez.
Qué necesario hacer público este problema...
Lo conté en mi primer libro. Pensé que debía hacerlo. Solo con que ayudara a una persona a salir de ello, merecía la pena. Y, a día de hoy, mucha gente me sigue dando las gracias. Hay que poner un altavoz al acoso para buscar soluciones.
¿Tenías amigas entonces?
No, únicamente tenía a mi hermana, Mónica, que es cuatro años mayor, y a mis padres. Menos mal que me refugié en el deporte como vía de escape.
Tu hermana, Mónica, que es representante de actores, es muy importante para ti...
Ella ha sido un pilar fundamental, como familia y también profesionalmente. Siempre ha sido mi referente: yo, de niña, quería ser ella. Soy muy de familia, muy de hogar, muy de mis padres. Aunque ellos viven en Alicante y yo en Madrid, el contacto es continuo y les cuento todo.
Sus armas: el deporte y el humor
¿El deporte sigue siendo fundamental en tu vida?
Sí, corro mucho, pero no porque huya (risas). Para mí, es una manera de meditar, que también lo hago, ¿eh? Me ayuda a canalizar la energía y, desde que pasó lo del covid, que me quedé con secuelas, ha sido mi salvavidas, una vez más. Me encanta la naturaleza e irme a pasear por el monte.
Y el sentido del humor es tu otra arma.
Siempre busco el punto cómico en mi día a día. Y luego, soy muy disfrutona, intento estar presente y vivir cada momento, aunque no es fácil. Me voy buscando mis pequeños mecanismos en mi cerebro para no entrar en piloto automático.
"Siempre busco el punto cómico en mi día a día y soy muy disfrutona", afirma la actriz, directora y escritora.
Foto: Alberto Bernárdez.
Su corto: 'Sexo a los 70'
En tu cortometraje, tocas un tema un tanto tabú en clave de humor. La idea surgió de una manera curiosa...
Sí, una mañana tras hablar con mi madre por teléfono, me pregunté cómo serían las relaciones íntimas de mis padres. Al momento, me dije: "¡No, no pienses eso por Dios, Vanesa!" (risas). Pero me di cuenta de que el hecho de cómo se relaciona la gente sexualmente a partir de los 70 era un temazo y un gran proyecto para arrancar con mi productora, Trébol 4.
Tienes un gran elenco.
Sí, Fernando Colomo, Mamen García, Carlos Sobera, Javier Bódalo y Laura Candil. Cuando Colomo, director superreconocido, me dijo que sí, tuve un poco de pánico la verdad (risas), pero pensé que era mi corto, mi visión, y él como actor es maravilloso. Y Carlos Sobera, que está a mil cosas, me pareció tan generoso que aceptara... Han sido todos estupendos.
Nos han chivado que el ambiente de rodaje era ideal.
Sí, hicimos una buena familia. Muchos ya habían trabajado en el primer corto y si dirijo una película, que es algo que está encima de la mesa, me llevaré a parte de mi equipo. Intento hacer piña porque creo que es bueno y también es una forma de agradecer el apoyo.
"No tenía amigas. Solo a mi hermana, Mónica, y a mis padres. Menos mal que me refugié en el deporte", cuenta Vanesa sobre la época en la que fue víctima del bullying.
Foto: Alberto Bernárdez.
¿Cómo surgió lo de ponerte al otro lado de la cámara?
Siempre he sido una actriz curiosa y, cuando tenía tiempo, me quedaba en el plató para investigar. Yo digo que soy una miedosa valiente porque creo que para saber si algo se te da bien, hay que experimentarlo, aunque tengas miedo.
Como actriz, solo estás pendiente de tu actuación, pero como directora, debes controlar luces, cámaras...
Es tu responsabilidad, porque todo depende de ti, pero tenía claro lo que quería y eso ha ayudado mucho a la hora de comunicarme con mi equipo. Todo lo que hay en el corto cuenta algo, no hay nada por casualidad: las flores, los cuadros, los colores... Estoy contenta, porque todo lo que tenía en mi cabeza está reflejado. Por suerte, hemos arrancado muy bien, porque nos han seleccionado en el Festival de Medina del Campo y nos lo ha comprado Movistar. Si se logran selecciones y premios, genial, pero el cometido es que la gente disfrute y se ría.
Su libro: 'A solas conmigo'
Y acabas de publicar tu segunda novela, 'A solas conmigo' (Ed. SUMA).
Sí, los segundos proyectos son un tanto complejos, porque tienes que dar un paso más allá. Con el corto, ha pasado y con el libro, también. Es una novela romántica con thriller psicológico donde hablo de las luchas de poder y el protagonista tiene que elegir entre el legado familiar y el amor. Arranca con la muerte del director de una conocida revista que deja una enigmática carta a su hijo. Hay secretos, traiciones... Quería reflejar como la vida puede cambiar de la noche a la mañana y que la verdad solo tiene un camino.
¿La vocación artística te surgió de niña?
Me gustaba escribir cuentos y hacer obras de teatro para mis padres, pero hacía atletismo y hasta ellos pensaban que mi camino iba por ahí. Con 16 años, no tenía claro qué quería ser. Luego la vida me llevó al mundo de la interpretación y, estando en él, descubrí que lo que me gustaba era crear. Soy feliz creando en todos los ámbitos: personajes, libros, dirección... ¡Lo necesito!
"Correr me ayuda a canalizar la energía y, desde que pasó lo del covid, que me quedé con secuelas, ha sido mi salvavidas, una vez más", dice la actriz Vanesa Romero.
Foto: Alberto Bernárdez.
El amor y otros proyectos
¿Tienes algún proyecto de interpretación a la vista?
Estrené la serie 'Nails' (Sky Show Time) y la película 'Hotel Bitcoin' (Netflix) y acabo de rodar un corto, 'Tristes tigres', en el que se habla de dislexia, dislalia y bullying, precisamente.
¿Qué ha supuesto la serie La que se avecina en tu vida?
Muchísimo. Ha marcado un antes y después tanto personal como profesionalmente. Esta serie y la anterior, 'Aquí no hay quien viva', han tenido un gran éxito, lo cual no es nada fácil, y me han abierto puertas para desarrollar otras facetas. Además, me he llevado de allí amigos maravillosos con los que sigo en contacto, como Nacho Guerrero, Eva Isanta o Pablo Chiapella.
Pero no rechazas volver a la serie, ¿verdad?
No, si surge, se estudia y yo feliz de volver a la que ha sido mi casa durante 17 años. Dar vida a este personaje era una fantasía. Pero fue en el momento del cambio de decorados y a mí me coincidió con la grabación del anterior corto y no se pudo encajar.
Y con tanto proyecto, ¿te queda tiempo para el amor?
(Risas) No tengo pareja en este momento. Estoy en una época muy tranquila, en paz, disfrutando mucho de estar conmigo, con mis amigos, mi familia, mis cuatro perros y mi trabajo. Una etapa distinta, pero muy bonita y enriquecedora.
Maquillaje y peluquería: Leticia Lara Guerrero.
Vestuario: Cortefiel, Slowlove, Hoss Intropia y Seasons by Macabla.
Localización: Hotel Quinta de los Cedros. Calle de Allendesalazar, 4, 28043 Madrid.
www.hotellaquintadeloscedros.com.