Es considerada una de las primerastop modelsnacidas en Hispanoamérica, su melena rubia y su físico envidiable la convirtieron en un icono a nivel mundial, la imagen de su rostro angelical y sus ojos azulones conquistaron las pasarelas más prestigiosas del mundo.
¿Pero cómo se convirtió en uno de las modelos que se adueñó también de la capacidad de presentar en televisión? Muy simple, su aplomo y seguridad en las pasarelas no era solo una fachada, también tenía una arrolladora personalidad, algo que hizo que su nombre traspasase fronteras y dejara atrás el llamar la atención solo por su físico. Era una estrella y así lo ha demostrado todos sus años posteriores al modelaje.
Una vida brillante siempre delante de los focos
No solo ha logrado cumplir el sueño de muchas niñas como el de aunar ser empresaria, actriz y presentadora en América, además de Italia y España. Es que su pasado como modelo tiene una anécdota detrás de lo más espectacular. Felizmente casada con el también empresario Alejandro Gravier con el que tiene cuatro hijos ( Balthazar, Tiziano, Benicio y Taína)
La argentina Valeria Mazza (52 años) ha demostrado que la edad es solo un número, volviendo con más fuerza que nunca a la parrilla televisiva española, presentando el popular programa‘Bailando con las estrellas’ junto al también carismático Jesús Vázquez con el que no puede derrochar más química.
Con motivo del éxito del programa de Telecinco cada noche de sábado, la modelo ha concedido una entrevista al medio Vanitatis para hablar de cómo fueron sus inicios en el mundo de las pasarelas.
Su inesperada irrupción en el mundo de la moda de la mano de Donatella Versace
Empezó a trabajar con tan solo 17 años, siendo solo una jovencita que no podía imaginar todo lo que la vida le deparaba: “En realidad, yo nunca soñé, ni deseé ser modelo, trabajar en la tele, ser una persona famosa… Por eso vivo todo con tanta ilusión. Entré en este mundo a modo de curiosidad, por así decir, porque todo el mundo me lo decía, y acabé viendo una gran oportunidad laboral. Entonces me mudé a Buenos Aires y lo convertí en mi trabajo. Al año me vine a Europa y el boom continuó. Ahí fue cuando me di cuenta de que podía construir una carrera y me esforcé al máximo por intentar aprender lo máximo posible y superarme a mí misma” Así relataba el inicio de la anécdota más divertida de su vida.
Y es que ha llegado a ser una de las musas de los 90 junto a grandes como Naomi Campbell o Claudia Schiffer:
“Nunca olvidaré que Gianni Versace fue la persona que me dio mi primera oportunidad en Europa y fue por total casualidad” comenzaba relatando: “Recuerdo que me llamó mi agencia y me dijo: ‘Ve corriendo al atelier que les falta una modelo para su desfile’. Llegué allí, caminé por dentro con una timidez espantosa y Gianni y Donatella me miraban y me decían: “Va bene”. A las horas estaba haciendo mi primer show con ellos. Fue estar en el momento justo y en el lugar adecuado, que dicen, aunque también debo decir que yo estaba entrenada, preparada y lista para cuando llegase ese momento.”
Su opinión sobre la polémica de la extrema delgadez en las pasarelas
Bien es cierto que ella nunca ha tenido ningún problema de alimentación ni nada relativo a la exigencia a la que se sometía a las modelos de su época, ya que siempre ha poseído un físico muy agradecido fruto de ser una gran deportista en su infancia: “No, también es verdad que yo venía de ser una deportista de alto rendimiento y llevé esa mentalidad a la moda y mi carrera de modelo. Es cierto que el nivel de exigencia es muy importante, pero como cualquier trabajo donde la principal herramienta es tu cuerpo, como, por ejemplo, los bailarines. Se busca la perfección y obviamente, en el terreno mental, eso no es para todo el mundo”.
Y es que Valeria Mazza es una mujer coetánea a su época y no es de extrañar que ella misma haya hablado de la evolución que ha tenido que hacer el mundo de la moda para no seguir perpetuando roles tóxicos y hábitos poco saludables entre las modelos, así lo comentaba en su última entrevista: “La moda debe adaptarse y acompañar al momento que estamos viviendo, y es evidente que el concepto de belleza de la década de los 90 ha cambiado. Antes se hablaba del 90-60-90; eso no existe más. Vivimos en un momento de mayor libertad de la mujer y las personas en general”.