Travis Barker ha hablado una semana después de su hospitalización y pedir que recen por él y ha confesado qué enfermedad le mantiene aún ingresado
La semana pasada todas las alarmas saltaron cuando se conoció que Travis Barker, el reciente marido de Kourtney Kardashian, había sido ingresado en un hospital con pronóstico grave, para después ser trasladado a otro centro médico para ser tratado de una misteriosa enfermedad a la que nadie de su entorno se atrevía a poner nombre, aunque acrecentaban la preocupación reinante pidiendo que rezasen por él y que se obrase un milagro. El músico continúa a día de hoy ingresado en el centro médico Cedars Sinai, situado en Los Ángeles, pero parece que ha encontrado las fuerzas suficientes para poder ponerse en contacto con el mundo y ofrecer más detalles sobre qué le ha sucedido y cómo se encuentra librando una batalla para recuperar la salud.
“Fui el lunes a hacerme una endoscopia sintiéndome bien, pero, después de la cena, empecé a sentir un dolor muy agudo y llevó en el hospital desde entonces”, comenzaba a detallar Travis Barker a sabiendas de que su silencio durante esta semana ha provocado una gran preocupación entre sus seguidores, que no tenían noticias de él y la familia Kardashian y la suya propia se habían cerrado en banda a la hora de dar detalles sobre qué le sucedía. Ahora por fin conocemos algo más qué le ha llevado a permanecer bajo cuidados médicos durante una semana llena de tensiones.
“Durante la endoscopia, se me quitó un pequeño pólipo de una zona sensible, que, desafortunadamente, afectó a un tubo de drenaje del páncreas, lo que ha desencadenado en una severa y amenazante pancreatitis”, continuaba informando el músico de Blink-182, que no ha querido restar gravedad a su cuadro clínico y por fin pone nombre a la enfermedad que le mantiene bajo cuidados profesionales. Un control médico que se alargará aún un tiempo más, como así ha adelantado él, aunque reconoce que ha experimentado una leve mejoría, lo que le ha permitido tener fuerzas suficientes como para explicar qué le ha llevado a su hospitalización.
Travis Barker se encuentra ahora siguiendo un tratamiento especializado para poder controlar la dolencia y recuperar la salud. Una tarea que lleva su tiempo, pero que parece no importarle demasiado al saber que está en las mejores manos: “Me siento tan agradecido que con un tratamiento intensivo me pueda encontrar mucho mejor”. Un agradecimiento que no solo ha querido trasmitir él a los profesionales que velan por su salud, sino que su mujer, la propia Kourtney Kardashian, también ha querido dar gracias a aquellas personas que se están desviviendo para que su marido pueda salir adelante y regresar a casa en cuanto le sea posible.
La hermana mayor de las hermanas Kardashian ha aprovechado la ocasión para mostrar una reflexión a sus seguidores sobre cómo la vida te da sustos y te cambia de un minuto a otro y el aprendizaje que rescata de esta experiencia: “Doy las gracias a todos los que han cuidado de mi esposo tan maravillosamente. Que semana tan aterradora a la vez que emotiva. Nuestra salud lo es todo y a veces lo damos por hecho cuando, rápidamente, todo puede cambiar”. Por fortuna, parece que todo está controlado y que el tratamiento al que se está sometiendo Travis Barker está dando sus frutos, lo que le asegura que en los próximos días pueda regresar a casa para continuar disfrutando de las mieles de su reciente matrimonio.