La 'influencer' ha querido transmitir un mensaje tranquilizador contando con todo detalle lo que le ha ocurrido: "Estoy a la espera de unos resultados".
Tamara Gorro ha reaparecido tras unos días totalmente desconectada debido a una operación de urgencia. Era su marido, Ezequiel Garay, quien se veía obligado a difundir una breve nota en la que indicaba que su mujer había pasado por el quirófano -sin entrar en detalles sobre su dolencia-. Ahora, ha sido la propia 'influencer' quien ha reconocido que no le gustan nada las intrigas y ha contado con todo detalle qué le ha ocurrido.
Con pijama y desde la habitación de su hogar, se ha mostrado muy agradecida por el apoyo recibido por parte de su fiel séquito de fans. Además, ha querido transmitir un mensaje tranquilizador asegurando que se encuentra bien. Hace tan solo un mes, tuvo fuertes dolores el parte baja del abdomen, razón por la que acudió rápidamente al médico. "El doctor vio una pelotita que no debería estar ahí, pero me dijo que quizás con la menstruación se podría eliminar". "Esa menstruación nunca llegó y en el cumpleaños de Shaila tuve que ir a urgencias por la noche. Eran como dolores puntuales, muy fuertes". Ha explicado que la mencionada pelotita había crecido un poco más y el ovario "estaba secuestrado y el médico decidió intervenirme para extraerla". Ha indicado que se trató de una operación de urgencia porque se hizo de un día para otro, dejando claro que no era porque estuviera muy grave.
Tamara lo ha contado todo de forma coloquial, como a ella se lo había explicado el doctor para que se entendiera fácilmente: "Me han dejado muy limpita y han extraído ese quiste. Como todo quiste tiene que ser analizado".
A la espera de los resultados
Ha hablado abiertamente a la que considera su otra familia, la virtual, asegurando que podría haber mantenido la intriga hasta el próximo jueves o viernes cuando tenga los resultados, pero decidía hacerlo antes. "Estoy a la espera de unos resultados que van a estar perfectos, sino lo estuvieran para adelante. Me guío por lo que el equipo médico me ha dicho". "Me encuentro débil, simplemente. Estoy aburrida, muy aburrida. Para mí estar parada es una locura, ya me conocéis", se sinceraba a través de un extenso vídeo publicado en su perfil de Instagram. Ahora toca reposo, pero en una semana estará prácticamente recuperada y podrá hacer su vida habitual guardando algunas precauciones.
Se ha emocionado por completo al recordar cómo el día de la operación, en el momento en el que la bajaron a quirófano para la anestesia, dos chicas ser acercaron a ella y le dijeron: "Soy familia virtual. Solamente vengo a darte la mano, no te puedo dar un beso, para decirte que estoy contigo y que me sientas, tienes a alguien de la familia contigo aquí". Ha agradecido ese gesto y ha confirmado que la tranquilizó por completo."Tengo muchas ganas de volver a mi vida normal. Esto no es nada, esto es un parón. Lo único bueno del 2020 es que mi princesa se ha curado, por favor, que termine ya, este año quiere dejar huella, el maldito", afirmaba.