Tamara Gorro está viviendo unos días complicados. En medio de la borágine de su rutina entre el trabajo y el cuidado de sus hijos, la 'influencer' tiene que lidiar también con el la preocupación que siente tras el ingreso de urgencia de su abuelo a causa de una enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) y que padece desde hace un tiempo. Ha sido la propia colaboradora de televisión la que ha querido dar la noticia. "El abuelito ayer por la tarde, cuando montamos la Navidad, le veíamos un poquito regular, con mucha tos, porque él tiene la enfermedad pulmonar EPOC, pro hoy ya no le veíamos bien. Y por eso hemos decidido traerle al hospital", ha empezado diciendo.
Como no podía ser de otra manera, Tamara Gorro no ha dejado a su abuelo solo en ningún momento. De hecho, no solo le acompañaba al centro médico, también se está quedando por las noches con él. Su estado le ha obligado a quedarse en el hospital ingresado y la 'influencer' ha querido compartir su estado de salud: "Ha venido al hospital y le han encontrado otras cositas a parte de su enfermedad, nada grave, pero que no son muy buenas para la edad que tiene. Hay que tratarlas con antibiótico y estamos en manos de los mejores, que son los sanitarios. Espero que pasemos poco tiempo, pero si es mucho, pues mucho", ha dicho un poco triste.
Sin embargo, ella deja claro que esa tristeza no la muestra delante de su abuelo: "Hasta que el abuelito se ponga bien. Lo que pasa que delante de él, pues hay que estar felices y riéndonos. Lo que intento es hacerle reír a cada minuto. Ya le conocéis, a los dos minutos me manda a freír espárragos", ha añadido.
Tamara Gorro está muy pendiente del estado de salud de su abuelo
El ingreso de su abuelo le ha afectado muchísimo porque para ella es como si fuera su padre: "Me duele y me parte el corazón ver al que siempre fue mi padre así y tengo miedo, mucho miedo. Pero como siempre he dicho, el miedo paraliza y yo lo voy a eliminar para disfrutar deél y darle lo mejor de este mundo", reconoce emocionada. Por este motivo no duda en quedarse con él por las noches aunque la tarde de antes haya tenido que trabajar y a la mañana siguiente tenga que ir a una tutoría del colegio de sus hijos.
De hecho, la pasada noche se quedaba con su abuelo y antes de ir al hospital no dudaba en llevarle una sorpresa a su abuelo. Tamara Gorro preguntaba a las enfermeras si su abuelo necesitaba una dieta especial durante su ingreso. El hecho de que le dijeran que no le ha llevado a pararse en una hamburguesería para comprar la cena a su abuelo: "Le voy a dar una sorpresa a mi yayo. Me he ido al burguer, he comprado dos sandwiches y una de patatas. Vamos a cenar juntos", ha dicho emocionada ante el momento que iba a vivir con su abuelo. Estamos seguros de que pronto saldrá del hospital, una noticia que haría muy feliz a Tamara Gorro.