Tamara Falcó está feliz. Sobre todo, desde que inició una relación junto a Íñigo Onieva, con el que afirma encontrarse muy feliz. Si bien su relación nació fruto de una amistad, lo cierto es que los dos confían en que su historia de amor perdure en el tiempo. La propia marquesa de Griñón así se lo hacía saber a él y a sus seguidores este lunes a través de varias imágenes y un texto que ha compartido en su red social. Dos fotos en la que aparecía ella, pero que han sido tomadas por el empresario, así como un vídeo en el que la pareja brinda por su futuro. Justo en el día en el que celebran su primer aniversario juntos, Tamara ha compartido cuál es su deseo respecto a su futuro sentimental. "Eres de fuera de este mundo. Por muchos más años juntos", dice Tamara en su último post.
Ambos brindan por la vida, por su historia de amor y por el futuro que les espera juntos. A ambos les sonríe también el plano sentimental, por lo que se puede afirmar que se encuentran en uno de sus mejores momentos vitales. Más aún si se tiene en cuenta que hace algunos meses vivieron una crisis sentimental después de repetidos rumores de infidelidad por parte de Íñigo, un bache del que consiguieron salir victoriosos. El camino no ha sido fácil, pero los dos se comprenden y se apoyan en cada uno de los pasos que dan. Ya viven juntos en el piso que alquiló Tamara Falcó en uno de los mejores barrios de Madrid, aunque su objetivo es mudarse a la casa que la hija de Isabel Preysler ha adquirido en el barrio de Puerta de Hierro. Todavía es una incógnita la fecha en la que le entregarán las llaves, por lo que de momento solo cabe esperar hasta que la obra haya finalizado.De vez en cuando comparten alguna imagen juntos, pero no es habitual que se dediquen halagos públicamente. En esta ocasión han hecho una excepción, han roto sus propias reglas y se han gritado públicamente lo importante que es el otro en su vida. Integrados en sus familias políticas, tanto Tamara Falcó como Íñigo Onieva han conseguido hacer buenas migas con el entorno y los amigos del otro, una situación que hace mucho más llevadero su día a día.
Tanto Tamara como Íñigo están obligados a viajar por cuestiones laborales, pero eso no evita que se esfuercen por sacar tiempo para la pareja. Aunque están inmersos en diferentes proyectos, su relación marcha viento en popa. Íñigo fue una pieza clave para Tamara cuando falleció su padre, Carlos Falcó, y desde entonces no se ha separado de ella. Forman un tándem perfecto, se complementan y ambos quieren que lo suyo perdure en el tiempo, un objetivo que de momento se está cumpliendo a la perfección.