La difícil situación económica de Julián Contreras Jr. se suma a problemas de salud

La vida de Julián Contreras Jr. (38 años) ha despertado especial interés en los últimos meses debido a las polémicas que le han acechado en los últimos tiempos. Tras su marcha de la capital por verse incapaz de asumir los elevados costes de los alquileres en Madrid. Conocimos este hecho por la controversia generada por su excasera, quien le ha denunciado públicamente y a través de varios programas de televisión el impago repetido del alquiler de la vivienda que arrendó al hijo pequeño de Carmina Ordóñez.

Julián Contreras Jr., habría sido acusado de tener una deuda de 30.000 euros entre cuotas impagadas y desperfectos. El hijo de Carmina Ordóñez, cansado de sus problemas económicos y legales con su casera, habría decidido poner tierra de por medio y buscar un nuevo sitio donde empezar de cero. La ciudad escogida en primera instancia fue Cuenca, llegando a instalarse en una casa que estaría en venta. Por este motivo, tal y como él mismo adelantó a sus seguidores, acabó abandonando la localidad de las casas colgantes en un corto periodo de tiempo, instalándose finalmente en el sur de la península. Julián Contreras Jr. ha encontrado nada más y nada menos que en Córdoba, el lugar donde acabar asentándose con su progenitor, el músico retirado Julián Contreras.

Julián Contreras Jr. se habría visto obligado a seguir trabajando por su difícil situación económica

El formato televisivo de Telecinco ‘Así es la vida’ publicaba las primeras imágenes de Julián en esta localidad andaluza en compañía de su perro, Rocky, confirmándose que el escritor habría conseguido por fin una nueva vivienda.

El nuevo piso de Julián y su padre cuenta con todo tipo de comodidades donde realizar cada noche sus famosos ‘streamings’ en YouTube de las 22:00h con los que pretendía lograr unos ingresos holgados que le permitieran empezar una vida de creador de contenido más independiente con la que poder dedicarse en cuerpo y alma a su verdadera pasión, la escritura de su próxima novela.

 Es verdad que esta nueva faceta laboral de Julián Contreras en el mundo digital empezó solo hace unos meses, concretamente en 2022. Desde finales del año pasado nunca ha faltado a la cita con los suscriptores que se conectan cada noche para verle en sus directos hasta que este miércoles informó que no realizaría este encuentro internauta por su reciente dolencia.

El delicado momento de salud por el que está pasando Julián Contreras Jr.

Sus problemas de salud están siendo de tal gravedad que Julián Contreras ha tenido que disculpar su ausencia por prescripción médica de esta manera: "Estoy teniendo ciertos problemas en la cama con las almohadas. Me dejé llevar y me está arruinando las noches. Llevo semanas mal. Me afecta todo y no tiene sentido que yo haga como que no es así. Me está amargando la vida", comentaba en el directo de este jueves, al que sí acudió fiel a su hora establecida.

De esta manera continuaba explicando la gravedad de su problema de salud y cómo esta etapa de cambios no estaba siendo de mucha ayuda: "Por un motivo que desconozco, estoy teniendo problemas con cosas que he pedido. Al final, tantos días mata la magia. Me genera estrés y últimamente todo se me va a las cervicales", comentaba a sus seguidores de su canal de YouTube. 

"Ayer estuve verdaderamente fatal y si a eso le sumas lo de las almohadas... no era viable. No tiene sentido contar otra cosa. Por suerte estoy aquí, con todas las ganas del mundo", explicaba mientras negaba a un seguidor la posibilidad de parar por unos días para descansar de su labor frente a la cámara.

"No puedo descansar. Hago eso y las suscripciones se paran, se frenan... no me lo puedo permitir. Soy un perfeccionista, pero son días complicados y todo se nota", ha comentado Julián Contreras de este brevísimo parón de miércoles.

Julián Contreras Jr. y su única fuente de ingresos fijos para pagar el alquiler: los 'streamings' 

El hermano de Fran Rivera (50 años) sabe lo que es pasar penurias económicas después de una falta de trabajo muy prolongada. Desde que se alejase del mundo televisivo, su nivel de vida descendió drásticamente y ha tenido que enfrentarse a las problemáticas de la vivienda: la falta de avales y candidatos a alquilarle una residencia sin un contrario indefinido.

Cabe destacar, que sus únicos ingresos provienen de sus canales de YouTube y Twitch con los que Julián se las ha ingeniado para conseguir un flujo constante de dinero cada 30 días con el que poder mantenerse a él y a su padre, músico retirado que también padece de salud delicada y que no trabaja. No es de extrañar que no quiera abandonar estos 'steamings', pues gracias a ellos está pudiendo pagar el alquiler, que asciende a los 700 euros mensuales.