Shakira ya está tranquila. La artista colombiana soñaba con este momento y, por fin, ha llegado. Cinco meses después de que ella y Piqué firmaran el acuerdo que le permitiría mudarse a Miami junto a sus hijos, la cantante se ha instalado. Ha comenzado una nueva vida a más de 7.000 kilómetros, eso sí, en una casa conocida para ella y sus pequeños. Una mansión que, por cierto, guarda ciertas similitudes con la vivienda de Barcelona en la que reside todavía también junto a sus padres. Completamente blanca, con grandes ventanales y con capacidad más que de sobra para los integrantes de la familia y es que posee nada más y nada menos que 750 metros cuadrados. Está ubicada en North Bay Road Drive, uno de los distritos más elitistas de Miami Beach, en el que residen famosos como Jennifer Lopez, lo que lo convierte en un sitio todavía más seguro y privado. Ella como el resto de vecinos velan por su privacidad, lo que hace muy difícil que sea captada por curiosos.
Una vivienda que, por supuesto, no está al alcance de todos los bolsillos. Aunque la artista la adquirió en el año 2001 por 3 millones de euros, lo cierto es que en la actualidad supera los 10 millones en el mercado. Todo un negocio redondo del que ella ahora no quiere aprovecharse, siendo en 2018 cuanto intentó deshacerse de esta casa. Shakira lo ha pensado bien y prefiere empezar en Miami en una casa en la que tiene gran parte de sus recuerdos, lo que está haciendo más llevadero su aterrizaje. Para ella está siendo más fácil empezar en un nuevo país, eso sí, donde tiene una casa a su gusto y en la que se siente a gusto junto a sus hijos. Un inmueble en el que tiene vistas al mar y en el que tienen espacio más que suficiente tanto en el interior de la propiedad como en el exterior, donde Milan y Sasha pueden jugar a sus anchas.La casa que está compuesta por varios edificios, fue construida en 1951, aunque ha sufrido varias reformas que Shakira encargó para que todo estuviera a su gusto. Tiene 6 dormitorios bastante amplios, 7 baños, un gimnasio y una enorme piscina en su exterior, no siendo este el único privilegio que posee. La vivienda además tiene un muelle privado, lo que permite a Shakira una salida independiente si desea salir a navegar junto a sus hijos y optar por un plan alternativo. Esta es una de las principales diferencias con su casa de Esplugues de Llobegrat (Barcelona), la vivienda en la que ha residido durante los últimos años y de la que, por cierto, ha sido desahuciada por su suegro, el padre de Piqué. Esto ha provocado que Shakira se vaya con un sabor agridulce, aunque ella ha agradecido a todo su entorno que le ayudaran a surfear las olas cuando los escollos eran más altos.
"Me establecí en Barcelona para darle una estabilidad a mis hijos, la misma que ahora buscamos en otro rincón del mundo al lado de familia, amigos y el mar. Hoy iniciamos un nuevo capítulo en la búsqueda de su felicidad. Gracias a todos los que surfearon junto a mi tantas olas allí en Barcelona, la ciudad en la que aprendí que sin duda la amistad es más larga que el amor. Gracias a todos los que allí me animaron, secaron mis lágrimas, me inspiraron y me hicieron crecer. Gracias a mi público español que me ha arropado siempre con su cariño y lealtad. Para ustedes solo un hasta luego y como decía tantas veces mi padre, nos vemos en las curvas", ha escrito la artista. Un post que ya supera los 3 millones de likes y en el que muchos famosos le han mostrado su apoyo. No te pierdas todas las fotos de la casa de Shakira en Miami, un hogar que, a buen seguro, se colará en más de una ocasión en sus redes sociales.