Shakira vuelve a ser noticia. Esta vez por nada que tenga que ver con Piqué sino con su situación legal. La cantante, según se lee en un auto dictado por la juez del Juzgado de Instrucción 2 de Esplugues de Llobregat, está acusada de seis delitos fiscales y, aunque siempre ha mantenido su inocencia, irá a juicio. Se señala a la cantante por haber defraudado presuntamente 14,5 millones de euros a Hacienda, siendo en este momento cuando se ha dictado la apertura del juicio por los supuestos delitos cometidos por la cantante entre 2012 y 2014, fechas en las que ella asegura que no vivía en España y por tanto no tributaba en nuestro país. Ahora se ha acordado la apertura del juicio oral y, aunque no adoptado ninguna medida contra ella, no ha podido evitar que todas las miradas vayan a ella.
Justo días antes de que se publicara esta información, Shakira concedió una entrevista en la que también habló sobre el problema que tiene con el fisco. "La Fiscalía se ha empeñado en recaudar el dinero devengado en mis giras internacionales y en The Voice cuando aún no era residente en España,
The Voice y han recurrido a medios indebidos para presionar, tal y como lo hacen a diario e injustamente con miles de contribuyentes con fines lucrativos", comentó en Elle, donde insistió en que la Fiscalía se había mostrado intransigente con ella. Ella confía en su inocencia al 100% y cree que no tienen pruebas suficientes contra ella. La Fiscalía ahora pide 8 años y dos meses de cárcel para Shakira. Los delitos imputados contra ella se refieren a la defraudación y utilización de personas jurídicas hasta en tres ejercicios, tanto en IRPF como en el Impuesto sobre el Patrimonio.Cabe recordar que en el año 2018, Shakira devolvió el dinero que le solicitaba Hacienda. En su momento confió en sus asesores, que le aconsejaron sobre cómo pagar impuestos. A día de hoy, la oficina de Shakira asegura que ella está al día con sus cuentas y que “desde hace muchos años no existe ninguna deuda pendiente con Hacienda”. Desde el comienzo del proceso penal, la ex del futbolista del Barcelona defendía que tenía su residencia legal en Bahamas y que visitaba nuestro país de forma esporádica. Es algo que echaron por tierra los inspectores de Hacienda, que indagaron en su vida privada en Barcelona junto a Piqué, con el que ha fijado su residencia en la ciudad condal desde el comienzo de su idilio. Tarjetas de crédito, fotos de paparazzis o diferentes movimientos podrían mostrar que vivía en Barcelona y no en Bahamas, tal y como ella decía.