Marta Riesco (37 años) no está viviendo su mejor momento. Y es que desde hace unos días sufre las incómodas consecuencias de tener un orzuelo en el ojo. Solo el o la que ha tenido uno entiendo que es una sensación muy desagradable. En un principio, este problema de salud le había llevado a tomar la decisión de no querer asistir a un evento profesional importante de su novio, Alejandro Caraza.

A pesar de que no se encuentra bien, la periodista sintió que debía estar en un día tan especial para su chico. No dudó en coger el coche y plantarse en la capital hispalense. Eso sí, hace unas horas tenía que volver a Madrid porque tiene que estar este miércoles en 'Ni que fuéramos Shhh'. A su vuelta a la capital española, a la joven le ha dado tiempo para pensar sobre el momento que atraviesa.

Marta Riesco hace una reflexión cuando pasa un delicado momento personal

"💫A veces me siento como una mierda. Me veo fea, gorda, con manchas en la piel... A veces no me gusto. Lo disimulo bien, con un buen disfraz de mujer segura y empoderada. Luego me paran, me dicen cosas bonitas sobre mi físico y me cuesta creerlo, pero lo agradezco. No me gusta verme sin maquillar, me da una inseguridad horrible", empieza diciendo Marta Riesco junto a varias fotos de grandes momentos que ha vivido estos días junto a su chico.

Y no duda en lanzar un llamativo zasca a su expareja, Antonio David Flores

De hecho, ha querido dedicarle unas bonitas palabras a su chico, que precisamente es el encargado de hacerla sentir mejor: "Es por eso que cuando conocí a @alejandro__caraza me encerraba en el baño hasta que volvía a maquillarme después de una noche entera sin hacerlo. No toda la culpa es mía, bueno, quizás sí. Pero también la culpa es de todas aquellas personas que pasaron por nuestra vida y no nos recordaron lo preciosas que somos. Alejandro lo hace cada día, hasta cuando no podía abrir el ojo con mi orzuelo. Cada hora me crecía más y más hasta que me planteé por un segundo no ir a la presentación del único chico que me ha tratado bien en mi vida. ¡Menuda gilipollez, pensaréis! Pero sí, muchas veces lo soy", le ha dedicado la periodista a su novio, sin olvidar lanzar un zasca a su expareja, Antonio David Flores.

Gracias a cómo le hace sentir su chico, Marta Riesco hizo un esfuerzo por él

No es un gran momento personal, pero Marta Riesco quiso hacer un esfuerzo por su novio. Y ha explicado cómo se dio todo para que cambiara de opinión: "El caso es que después de llorar y llorar, me puse mi mejor sonrisa y fui para allá porque se lo debía. Me enfrenté a la prensa y a su familia con la autoestima por el subsuelo, pero lo hice y lo disfruté. Nada más verme, Alejandro me dijo ¡Estás preciosa! Y yo esa noche olvidé mi orzuelo, lo fea que me habían hecho sentir hasta ese momento y lo mala que he sido conmigo misma frente al espejo. ¡Cómo me habría arrepentido de no estar al lado de Alejandro esa noche tan bonita y especial! Ojalá todos y todas encontréis alguien que os recuerde cada día lo precios@s que sois. No merecemos menos. Te quiero @alejandro__caraza ♥️".

La respuesta de Alejandro Caraza a esta tierna reflexión de su novia

Esta publicación ha sido muy aplaudida por muchos de sus seguidores, pero también por Alejandra Caraza, que le ha contestado con un mensaje de lo más especial y que no hará más que subir la autoestima de la periodista: "No te imaginas lo orgulloso que me siento de ti. Sigue siendo así que te entenderé siempre ❤️ te quiero vida y no olvides que recibes lo que das amor, ERES ÚNICA", le hace saber el cantante delante de todos sus seguidores.

No hay duda de que Alejandro Caraza le ha devuelto la felicidad a Marta Riesco tras la convulsa historia que vivió con Antonio David Flores. Desde que se confirmara su relación, la pareja no duda en gritar a los cuatro vientos su amor y están dispuestos a seguir haciéndolo. Pero, ¿quién es Alejandro? Es un artista sevillano y exconcursante de 'La Voz', donde participó hace apenas un año. Ahora podría dedicarle una canción a la periodista, una moda que muchos cantantes hacen a sus parejas o exparejas.