Rafael Amargo acaba el 2021 de la peor manera. El bailaor acaba de conocer que se enfrenta a una complicada situación legal, ya que la Fiscalía de Madrid ha pedido nueve años de cárcel para él. El Ministerio Público le considera autor de "un delito contra la salud pública, en la modalidad de venta de drogas". En el escrito aseguran que tanto el artista como el otro acusado, "se venían dedicando de manera concertada y persistente a la distribución de sustancias estupefacientes, entre otras metanfetamina, a terceras personas a cambio de dinero». Mantienen que compraban estas sustancias de forma conjunta para luego repartir la droga y venderla, por lo que solicitan para ambos la misma pena y para un tercer acusado seis años.

Rafael Amargo
Europa Press

Mantienen que Rafael Amargo vendía estas sustancias estupefaciente a aquellos que acudían a su domicilio o bien llegaban a los clientes a través de un hombre de confianza. Este último era, según el escrito de la Fiscalía, quien "a sabiendas de lo que portaba, después de hacer la entrega correspondiente regresaba al domicilio para entregarle el dinero obtenido con la venta”. Tanto es así llegan a puntualizar un hecho por parte del que era su mano derecha en lo que a producciones se refiere, quien fue sorprendido por la Policía justo cuando le iba a entregar a un cliente metanfetamina. En concreto, una bolsa de 0,943 gramos con una pureza del 76,7%, siendo en otras ocasiones cuando las autoridades pillaron a varias personas entrando en el domicilio de Amargo y saliendo de forma apresurada con "sustancias estupefacientes", tal y como comprobaron tras cachearles.A comienzos de diciembre, justo cuando se cumplía un año de su detención, se conocieron las conclusiones del juez. El magistrado una vez terminada la investigación contra el bailaor, su pareja y dos de sus socios, mantuvo que él era el cabecilla del entramado. «Se encargaba de la compra de sustancias estupefacientes para abastecer al grupo», dicen. El juzgado de Instrucción número 48 de Madrid sostuvo entonces que «hay indicios suficientes» para que el juicio siga adelante, así como para juzgarles por un delito contra la salud pública, en la modalidad de tráfico de drogas y pertenencia a grupo criminal. 

Rafael Amargo se enfrenta a 9 años de prisión "por un delito continuado de tráfico de drogas"
Foto: Gtres

Juan Ramón Reig aseguraba en este auto que la vivienda de Rafael Amargo era el centro de operaciones para la venta de drogas. En el citado documento también se recoge que los investigados, entre los que se encuentra Amargo y su novia, Luciana, «actuaban de común acuerdo en la recepción, preparación y distribución de sustancias estupefacientes, en especial metanfetamina, a terceros». Llama la atención por tanto que no haya solicitud firme, por parte de la Fiscalía, hacia Luciana, al menos hasta el momento.(Noticia en elaboración)