Se llama María Pelae. Es malagueña, cantante, y promete revolucionar el panorama musical español con su particular fusión de estilos. Igual canta una copla que un fandango, o que entona ritmos urbanos emulando a Residente, exvocalista de Calle 13. Su último pelotazo artístico, y que ha revolucionado las plataformas digitales, ha sido su remix de "¡Cómo me las maravillaría yo", de Lola Flores. Lo ha hecho tan bien, y de una manera tan arrebatadora y llamativa, que muchos ojos ya se han fijado en ella. Incluido Pablo Motos, que la ha invitado por primera vez a 'El Hormiguero'. 

Por el número de seguidores que vigilan sus movimientos en las redes sociales, es evidente que aún no se ha convertido aún en una celebridad. De momento solo suma 50,5 'followers' en su cuenta de Instagram. Pero su capacidad para enganchar al público y la facilidad con la que se adapta a todos los géneros y estilos musicales podrían ser las llaves que la conduzcan definitivamente al estrellato.

"Desde pequeña he escuchado a Lola Flores y a Celia Cruz"

La artista, de 30 años, ha reivindicado la diversidad como una manera de expresarse. No concibe expresarse si no es a través de la fusión. "Desde pequeña he escuchado a Lola Flores y a Celia Cruz. Una es todo lo que escucha y cuando lo lleva a lo suyo personal, puede sonar igual un pregón de una canción de Residente que una de Lola Flores. Cuando ya los haces tuyos, ¿por qué no unirlos?, si ya estás dentro de la misma línea", ha explicado a 'El rescate musical'.

Sincera, intensa, profunda, recientemente publicaba una reflexión en sus redes sociales. "Me gusta mirar a la vida a los ojos y preguntarle; ¿Qué me traes ahora cariño?

Pongo pose flamenca y le digo "Pa' lante". Y es que "si tú me hubieras visto hace unos años no imaginarías esto que estás viendo". Empecé la semana de esta guisa y la acabo llenita de energía!! Alegría a raudales para todas/os/es! Como si fuera un mantra repítanse "PA'LANTE!!", señalaba.

"Le doy un beso en la frente a la Lola Flores antes de acostarme»

Empezó a cantar a los nueve años, pero el arte le viene de familia. Su tatarabuela era cantaora del famoso Café de Chinitas, uno de los tablaos flamencos con más solera de Madrid. «Me mandan muchos mensajes diciéndome que si lo que quiero es llegar a más personas... Pues claro. Qué pasa si quiero llegar a más personas si yo sé que no he perdido la esencia en el fondo», ha explicado al diario 'La opinión de Málaga'.

Cuando la llaman "la Lola Flores del siglo XXI" se siente halagada. Es admiradora de 'la faraona' desde la infancia. "Soy súper fanática de ella. Tengo una muñeca enorme en mi mesita de noche, herencia de mi abuela. Mi pareja tiene que aceptar que yo le doy un beso en la frente a la Lola Flores antes de acostarme», ha confesado.