La intérprete de Tokio en ‘La casa de papel’ hizo referencia al retraso óseo, una anomalía que experimenta desde que era muy pequeña.
La vida de Úrsula Corberó no ha sido, en absoluto, un camino de rosas. Pese a haber triunfado a muy temprana edad con su papel como Ruth en ‘Física o Química’, la actriz ha atenido que hacer frente a otros problemas dentro del terreno personal. Así lo revelaba ella misma durante su última aparición pública en el podcast ‘La script’, de María Guerra. Un espacio 2.0 en el que la intérprete de Tokio en ‘La casa de papel’ se sinceraba al máximo sobre la enfermedad que padece desde que era niña: retraso óseo.
Vídeo: @la_script Instagram
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“Tengo un retraso óseo de cinco años. Esto no lo he dicho nunca, porque suena un poco mal, pero lo digo ahora, no pasa nada (…) Ahora tengo los huesos de una de 30, en vez de los de una de 34. Me bajó mi primera menstruación con 17 años (…) Me hacían bullying, porque yo era tan pequeña que no podía con todos los libros en la mochila, y tenía que llevar carrito”. Con estas palabras, Úrsula Corberó hacía referencia al calvario que tuvo que pasar durante su infancia a consecuencia de esta afección, hasta ahora desconocida para muchos.
Cómo saber si se padece retraso óseo
Pero, ¿qué significado tiene realmente esta dolencia? El retraso óseo se basa en la maduración del esqueleto en un momento en concreto, tal y como se confirma desde Familia y Salud. Esta evolución en los huesos de un niño podría no tener que ver en absoluto con su edad real, lo que indicaría que el pequeño estaría padeciendo un problema de crecimiento. Una anomalía que en determinados casos tiene que ser tratada por un profesional médico, aunque no suele tener mayor gravedad.
Para saber qué es lo que realmente produce el retraso óseo hace falta fijarse en el cartílago del crecimiento, un tejido que está presente en todos los huesos del cuerpo de un ser humano de temprana edad y por el cual los niños van aumentando su tamaño a medida que pasa el tiempo. Con los años, esta membrana se va calcificando y, cuando termina de hacerlo por completo, la persona deja de crecer de forma definitiva. Este punto es el que marca que una persona tenga la edad ósea adelantada, retrasada o coincidente con la edad real, aunque esto último es lo que sucede en la gran mayoría de casos.
Si se tienen sospechas sobre una irregularidad en la edad ósea, la mejor opción es la de acudir a un centro médico y pedir una radiografía de la mano. Precisamente esta parte del cuerpo es una de las que mayor concentración de huesos tiene, y todos ellos cuentan con su propio cartílago del crecimiento. Es por ello que, cuando un médico considera que un niño no está creciendo al ritmo que debería, primero le hace un estudio de esta zona para descartar un retraso óseo. Para ello, se tiene en cuenta un modelo de imagen radiológica que está disponible para cada año de edad real. Una instantánea que se compara con la del paciente para saber en qué punto se encuentra y cómo se debe proceder o si esto podría afectar en el transcurso de su rutina habitual.
Sea como fuere, si algo está claro es que, aunque fue un asunto que incomodó a Úrsula Corberó cuando era una niña, ahora incluso se atreve a referirse a ello de forma positiva. Y es que, se trata de una enfermedad que no ha impedido en absoluto que desarrolle su trayectoria profesional, la cual marcha a las mil maravillas. Tanto es así, que recientemente la de San Pedro de Vilamajor ha estrenado en Netflix 'El cuerpo en llamas' junto a Quim Gutiérrez.