Han sido unos meses complicados para Esther Doña. La mujer de Carlos Falcó ha vivido uno de los momentos más duros de su vida después de la muerte del Marqués de Griñón el pasado 20 de marzo a consecuencia del coronavirus. Por si fuera poco, la propia Esther también se contagió de la Covid-19, lo que hizo que incluso no pudiera asistir al funeral de su marido. Un triste recuerdo que no podrá olvidar. Ahora, tres meses después reaparece en el funeral de Manolo Segura, el padre biológico de Borja Thyssen que ha fallecido este mismo jueves en el hospital San Francisco de Asís de Madrid.

Esther Doña reaparece tres meses después de la muerte de Carlos Falcó

Tras el fallecimiento de Manolo, sus restos mortales han sido trasladados hasta el madrileño tanatorio La Paz, donde se han acercado sus familiares y amigos para darle un último adiós. Entre los primeros en llegar se encontraba Esther Doña, que es la primera vez que aparece tras la muerte de Carlos Falcó. La que fuera marquesa de Griñón llegaba con el rostro serio y escondiéndose detrás de unas grandes gafas de sol. Además, ha evitado responder a las preguntas de la prensa al ser preguntada por los problemas familiares de ella con los hijos de Falcó, además de que el título de Marquesa de Griñón haya sido para Tamara Falcó.

Esther Doña ha preferido mantenerse en silencio ya que no era el momento de hablar de los problemas familiares ni de sus asuntos familiares, ya que tal y como ella mismo ha indicado ha acudido al tanatorio para apoyar a su amiga en estos momentos tan complicados a los que se enfrenta. Son las primeras imágenes de la que fuera marquesa desde el fallecimiento de Carlos Falcó y justamente son unos días después de que saliera a la luz la noticia de que se había visto obligada a abandonar el palacio El Rincón, situado en la Aldea del Fresno, al suroeste de Madrid, donde ha estado viviendo durante los últimos años junto al Marqués de Griñón y donde ha pasado el confinamiento.

Esther ha abandonado el Palacio que compartía con Carlos Falcó

Ahora, los Falcó han tomado la decisión de poner a la venta este palacio, lo que obliga a Esther Doña a abandonar la que ha sido su casa durante mucho tiempo. Ahora se ha mudado al piso que ella tenía en Mahadahonda, una de las zonas más exclusivas de Madrid, en compañía de su perrito, un bichón maltés que precisamente le regaló el marqués de Griñón durante unas Navidades. A pesar de que ella asegura que se ha ido por voluntad propia, el hecho de que los hijos de Falcó hayan decidido poner a la venta este palacio también tendría un poco de culpa. Ahora, en mitad de toda esta polémica, Esther Doña reaparece tres meses después de la muerte de su marido y envuelta en diferentes problemas familiares. Os mostramos sus primeras imágenes.