Han pasado ocho meses desde que Pelayo Díaz anunció que se divorciaba de Andy McDougall. Después de tres años de relación, la pareja decidía tomar rumbos separados. "El amor se ha ido pero la magia se queda", confesaba entonces el experto en moda. Y aunque la ruptura se produjo de manera amistosa, fue un duelo doloroso: “Estoy triste, pero es una decisión que teníamos que tomar y estoy bien”. Desde entonces no se le conocía pareja... hasta ahora. Esta semana, el instagrammer acudió al International Influencers Awards acompañado por un atractivo joven. Se llama Gal Marom y esto es lo que se sabe de él...
El nuevo novio de Pelayo nació en Francia, trabaja como Product Manager
Product Manager y Consultant y vive
onsultant y vive entre Madrid y Londres. Según el entorno del estilista y bloguero, ambos comparten estilo de vida, así como varias pasiones en común: la moda, los viajes y los caballos. En su perfil de Instagram lo siguen más de 17.000 followers, lo que lo convierte en un microinfluencer. Esta cifra dista mucho del millón de seguidores que sigue los pasos del asturiano, todo un icono en el mundo de la moda en nuestro país.
Desde que empezaron su relación, ambos han sido discretos, pero tampoco ocultan su idilio. Hace unas horas compartían mesa y mantel con la modelo y actriz Esther Cañadas, con quien disfrutaron de "las noches mágicas de Ibiza", como el propio Pelayo ha destacado.
Cabe recordar que Pelayo Díaz sigue manteniendo una excelente relación con su expareja. “No hay por qué acabar mal las cosas, en España estamos muy acostumbrados a que cuando una relación se acaba se tienen que llevar mal y eso es lo triste. Así que nada, lo vamos a llevar lo mejor posible y cuando tengamos algo que decir os adoro y os lo haré saber”, decía tras confirmar que ambos ponían punto y final a su romance.
Prueba del enorme afecto que siente por Andy es la preciosa carta que le dedicó al anunciar que terminaban. ("Una relación como la nuestra se merece una carta de despedida", decía). La misiva, que comenzaba con un "querido Andy", arrancaba así:
"Estoy muy orgulloso de nosotros, del amor y del respeto que nos tenemos. De como empezó y de como seguirá, porque aquí no se acaba. Apareciste en mi vida de repente y nos reconocimos como dos chavales que perseguían el mismo sueño: AMARSE".
"Y desde ese verano de 2017 exprimimos cada minuto juntos, cada locura, cada viaje! Ojalá todo el mundo pueda experimentar al menos una vez en la vida lo que es el amor, lo que es despertarse cada mañana y salir a gritar al balcón “¡soy feliz!” tan alto que duela porque no puedes contenerlo dentro. Yo lo sé, yo eso lo he vivido, y tú también. Acaso no nos convierte eso en unos afortunados? Mira, no se cuál es el siguiente paso, pero de lo que estoy seguro es que nos tendremos cerca", proseguía. "Te quiero en mi vida para siempre, quiero verte crecer, triunfar y volver a enamorarte porque esa sonrisa tuya es demasiado bonita para perderse en la rutina. Afortunado el que venga después y, aunque me duela y a veces sea duro, aquí estaré siempre antes de que me necesites. Me alegro de haber hecho juntos una parte del camino, no me arrepiento de nada y volvería a apostar mil veces más por nosotros. Gracias por haber jugado conmigo a ser niños otra vez. Y recuerda, si no sabes que ponerte, ponte feliz".