Tener una de las carreras más sólidas del panorama musical y 23 años en la industria han llevado a Mercedes Trujillo Callealta, más conocida como Merche, a convertirse en una de nuestras cantautoras más famosas. Dulce y cercana Merche habla para SEMANA y nos revela detalles inéditos de su vida, de la maternidad y del amor. Y también nos cuenta que su sueño de triunfar en la música le llegó cuando trabajaba como secretaria.

¿Con qué Merche estoy sentado yo ahora mismo?

Con una Merche feliz. Evidentemente la felicidad no es un estado continuo, son momentitos, pero sí que es verdad que estoy en una etapa muy bonita, disfrutando mucho de mi niña y disfrutando muchísimo de mi profesión.

Me imagino entonces que muchos de esos momentos te los proporcionará ella.

¡Claro! A ver, mira, mi hija nació en la India, pero es la más madrileña del mundo (risas). Es muy divertida y risueña.

¿Cómo es ella?

Es una niña muy especial y es verdad que todas las madres y los padres hablamos de nuestros hijos como los mejores, pero es cierto que yo he tenido mucha suerte. A mí me ha tocado un tesoro y ese es mi mayor éxito en la vida.

Merche

Fotos: Joan Crisol

¿Cuál es tu mayor preocupación como madre?

Antes la llamaba 1.000 veces (risas), pero ahora no porque ya tiene 14 años.

Entonces, ¿antes madre que artista?

Ser madre es la faceta que más bordo. Lo que mejor sé hacer. Me encanta. Yo intento no perderme ni un momento de ella. Mi única preocupación es que ella esté sana y esté feliz. Ese es el objetivo de mi vida. Antes el trabajo lo era todo para mí, ahora es muy importante porque me encanta. Sigue siendo mi pasión, pero para mí lo más importante, y eso sí que es intocable, es mi niña.

¿Y cuándo trabajas?

Si tengo que trabajar procuro también no perdérmelo. Lo que pasa que no la puedo llevar al cole, pero yo la despierto, le pongo el desayuno y disfruto con ella. Es graciosísima y es mi amor.

Se te cae la baba…

Es que mi niña tiene una inteligencia... Todavía es muy chica, pero tiene una inteligencia emocional brutal. Hace cuestión de un mes su tutora me mandó un email que por poco me muero. No pude llorar más.  En ese email me daba la enhorabuena porque había sido la alumna de la semana. Me decían que era muy buena, que tenía un corazón muy bueno, que tenía una capacidad de trabajo brutal y que más quisieran muchos adultos tener la capacidad de esfuerzo que ella pone en todas sus cosas. Al final ponía: enhorabuena por la hija que estás criando (se emociona).

Merche

Fotos: Joan Crisol

¿Preparada para convertirte en suegra el día de mañana y compartirla?

La verdad es que yo estoy preparada para todo. En lo que ella quiera siempre le echaré de la mano Quiero que disfrute de su adolescencia, que sea feliz y que no la roce ni el aire. Cuando empiece a salir, me iré con el coche y me quedaré en la discoteca fuera, para seguirla y para que no le pase nada (risas).

¿Cómo vive Merche las decepciones?

A mí me duele. Yo soy de las muy sufridas. De hecho, mi hermana Verónica siempre me lo dice.

¿También en el plano sentimental?

Yo he querido mucho, me he sentido muy querida. ¿Qué he hecho daño? Si, probablemente. Pero es verdad que te enamoras y te desenamoras. Ahí no manda nadie y me ha pasado y he lastimado a la persona con la que estaba y al revés, también me han hecho daño a mí. En el plano romántico te puedo decir que he tenido una vida muy completa.

¿Y ahora cómo estás?

Ahora estoy soltera, pero es verdad que también me siento muy feliz y llena de amor por muchos lados. Yo creo que hay mucha Merche por delante, en lo profesional y también en lo personal.

Merche

Fotos: Joan Crisol

Cumples 23 años en el mundo de la música.

Y sigo con la misma ilusión que cuando empecé, que parece que fue antes de ayer.  

Tu nueva canción, 'Tengo Fe', es toda una declaración de intenciones.

Es que yo tengo mucha esperanza en las personas, en el ser humano. En la canción hablo del amor en mayúsculas, del amor en todos los aspectos.

¿Te costó que te tomaran en serio como cantautora?

Al principio, recuerdo que cuando me hacían entrevistas me decían: “Qué canción tan bonita, ¿quién te la ha compuesto?”.  En el primer disco es normal, en el segundo, vale, pero ¿que pasen los años y todavía no se hayan enterado? Yo recuerdo que a mí me nominaron a los Grammy con el quinto disco, exactamente con 'Si te marchas', y me preguntaron: “¿Quién te ha compuesto la canción?”. Y yo me decía: "Después de una sarta de años y sigue pasando lo mismo".

¿Y qué explicación le dabas a eso?

La única explicación que yo le daba y también el equipo que tenía en aquel entonces, era probablemente mi estética. Ahora puede ir todo el mundo como le dé la gana, pero en mi época, no cumplía la estética de aquel momento. De lo que era un cantautor, me refiero. Pero yo me rebelaba, eh. ¿Si era porque llevaba una minifalda? Pues más corta me ponía la falda ¿Si era por el tacón? Pues más alto me ponía el tacón. Y así con todo.

Tampoco debió ser fácil.

Pero fíjate que esto que te cuento me ha pasado más con los medios y con la industria que con el público. El público lo tuvo claro desde el principio. El público desde el principio me dio la mano, no me la soltó en ningún momento y sabe perfectamente quién soy yo y no he tenido que explicar continuamente a lo largo de todos estos años quién soy. No hay nadie con un traje de chaqueta y con corbata detrás de mi proyecto, soy yo la que lidero mi proyecto, con mis errores y mis aciertos y así desde que empecé.

Insisto que no debió ser fácil liderar en un mundo, y en ese momento, tan machista.

Yo me sentía como un poco herida. Por eso a mí la nominación a los Grammy fue tan importante. Los que me nominaron y los que me votaron no le importaban si eras rubia, morena, alta, baja o lo que fuera. Entonces me sentí muy honrada.

 

Merche

Fotos: Joan Crisol

¿Siempre soñaste con dedicarte a esta profesión?

Desde chiquitita siempre soñé con dedicarme a contar historias y cantarlas, pero tampoco mi felicidad dependía de eso. Yo no conozco a muchas artistas que, con todo el talento del mundo, la vida no les ha dado ese momento y viven amargados o amargadas por conseguirlo. Pero yo, por ejemplo, era muy feliz siendo secretaria de dirección.

Ese dato lo desconocía.

Yo estudié en el Conservatorio y soy profesora de música. Ejercí y todo porque yo decía que, si algún día pasaba el tren de cumplir mi sueño, quería que me pillara aprendida y preparada.  Yo quería cumplir mi sueño de dedicarme a la música, pero mi vida no podía depender tampoco de ese sueño, ni mi felicidad tampoco. Entonces yo ya era muy feliz. Yo era secretaria de dirección, traducía contratos navales jurídicos, imagínate, pero me sentía muy realizada. Empecé a estudiar Administración y Dirección de Empresas y la vida me ha llevado a estar sentada ahora aquí contigo.

¿Ser famosa estaba entre tus sueños?

Nunca he querido ser famosa. No era lo que buscaba, yo buscaba emocionar y tocar el corazón de la gente.

Dices que te encuentras en el momento más dulce de tu carrera, ¿pero podrías recordarme el más amargo?

Pues cuando publiqué mi álbum 'Es ahora'. Yo me curré ese disco lo más grande, regalaba hasta una agenda que hice yo y no sirvió absolutamente para nada porque llegó el COVID. Es verdad que fue un palo, pero tampoco soy yo muy de quedarme lamiéndome las heridas. A mí me gusta llorar, porque yo soy muy llorona, llorar, desahogarme, echarlo para fuera, soltarlo... Pero al día siguiente me levanto y empiezo ya con otra actitud y buscando soluciones.

Merche

Fotos: Joan Crisol

Has comentado que ahora comienzas con una gira de conciertos, pero que va a ser muy íntima.

Empezamos el 22 de febrero en Madrid. Desde que celebré el 20 aniversario siempre me gusta hacer algo especial. Este año he querido empezar la gira con estos conciertos tan especiales en sitios chiquititos y con muchas sorpresas que la gente no se espera y que espero que les guste. Voy a cantar canciones que llevo muchísimo tiempo sin cantar, que las he recuperado y las he versionado tirando más para Andalucía, para mis raíces.

Tu padre estaría muy orgulloso de este aniversario, ¿no crees? 

A mi padre siempre lo tengo presente, sobre todo, en los escenarios. Miro  al cielo y digo: “Mira, papá”.

Estilista: María Verardini.
Asistente de estilismo: Jes  Portilla
Vestuario: Scandal54, KIABI, Mustang, Chiarella, Lisi Fracchia y Manuel de la Vega.
Escenario: Hotel Emperador Madrid. www.emperadorhotel.com
Agradecimientos: Arriba Los corazones Experience.