Marta Peñate ha vuelto a sincerarse aprovechando que tiene un canal en ‘MtMad’, espacio en el que se ha topado con una especie de confesionario en el que deshacerse de los fantasmas de su pasado. Si hace unos meses hablaba de cómo había tenido que sobrevivir con un solo riñón cuando aún era una niña y se le detectó un tumor o cuando habló sin reparos de su adicción a las drogas, ahora la exconcursante de ‘Gran Hermano’ y ‘La isla de las tentaciones’ ha puesto sobre la mesa un duro episodio de malos tratos por parte de una expareja que le ha marcado a la hora de relacionarse con los hombres. Un episodio del que nunca antes había hablado al no encontrar el momento o el valor necesario para compartirlo y que ha provocado una oleada de solidaridad hacia ella en las redes sociales.
Marta Peña decidió animar un poco su canal de vídeos y ha invitado a unos compañeros de plataforma, Steisy y Pablo, que acudieron a cenar a su casa para abrirse como nunca con sus amigos y, de paso, con sus seguidores. Con ellos se ha sentido cómoda hasta el punto de tratar un tema que nunca antes quiso exponer delante de una cámara. Todo surgió cuando el novio de Steisy le preguntó sobre cómo se inició el romance entre ella y Lester, su novio durante trece años hasta que la tentación se coló entre ellos. Marta narró algo inesperado: “Yo estaba en ese momento con una persona y le puse los cuernos con él”, comenzaba a explicar, para después desvelar que “sufrí un tipo de maltrato físico por parte de él”, asegura la joven, que no llega a decir exactamente qué sucedió pero sí que el suceso se manifestó hasta en tres ocasiones.
“Estuve con él dos años. Le llamé con Lester delante y le dije que le había sido infiel”, reconoce Marta Peñate sobre cómo se liberó de su novio, a quien acusa de haberle maltratado hasta en tres ocasiones distintas. Tras la difícil llamada, Lester le animó para que se quedase a dormir con ella con la única intención de protegerla y hacerle entender que no estaba sola a partir de ese momento. “Yo estaba echa un mar de lágrimas, justo antes de estar con Lester mi exnovio había vuelto a…”, desliza sin llegar a pronunciarlo por el dolor que le provoca el mero recuerdo de este episodio tan oscuro de su pasado: “Le dije que no y me fui a un hotel de meditación”.
Marta Peñate reconoce que no es sencillo salir de una relación en la que se establecen desiguales niveles de poder. En un primer momento, todo se justifica y se busca una explicación a un maltrato que nunca está justificado: “Piensas que fue sin querer, que es porque tiene un carácter nervioso, que no lo volverá a hacer. Al menos eso pensé yo las dos primeras veces”, reconoce Marta, sin querer entrar demasiado en el suceso concreto.
Todo esto le toca muy de cerca a la propia Steisy, que también sufrió un durísimo episodio de malos tratos cuando era menor y que le ha sido muy difícil reponerse años después. Ella entiende, por su propia experiencia, que el peligro no solo está en salir de esa relación, sino en no entrar en otra igual de tóxica, pues considera muy fácil que ante el sentimiento de indefensión se busque la protección en otra persona y, con ello, se le otorga un poder: “Al final casi siempre ocurre que sales con otra persona con la que mantienes una relación que sigue siendo tóxica, pero piensas que bueno, al menos no me levanta la mano”.
La conversación había comenzado a ponerse incómoda para Marta Peñate, que reconoce que “nunca antes lo había contado” y cree que remover el pasado tan solo podría causarle daño. Es por eso que zanjó la charla al respecto y reconducir la velada en otras cuestiones menos desagradables para ella y para sus invitados.