No hay duda que una boda conlleva mucho trabajo. Marta López está sufriendo las consecuencias ahora, unos días después de haber celebrado su 'sí, quiero' junto a Kiko Matamoros. El después de un enlace tampoco es tranquilo, ya que hay mucho con lo que cumplir. Compromisos profesionales, las quedadas con familia y amigos y ponerse al día con las maletas después de haber disfrutado de un increíble viaje de novios.
Marta López lo está notando y no ha dudado en confesar que está desbordada. Tanto es así que ha tenido que cancelar un planazo con amigas para respirar. Ella ha sido la encargada de hablar de este sentimiento: "Buah. Estoy muy muy cansada mentalmente. Feliz y cansada al mismo tiempo. Hoy tengo comida con amigas y he abortado misión porque literalmente no puedo tirar de mí", empieza diciendo junto a una imagen en la que la vemos con el rostro agotado.
"Entre mi boda, luna de miel (aún me queda por compartir de ambas cosas), viajes por trabajo, uni... estoy agotada. Llevo sin entrenar bien (lo cual me despeja y me da más energía a la vez que me mantiene en forma) casi un mes. Solo me apetece estar tranquila una tarde en casa, pero luego me levanto a hacer contenido o me pongo a hacer algo", dice a sabiendas que nunca para aunque se lo proponga.
Aún así, este lunes ha tratado de tomarse un descanso: "Hoy me he levantado a las 12. Ayer no me pude dormir hasta las 4 am. Llamaron al telefonillo de abajo y me asusté y ya no me podía dormir. Ayer además fue la boda de mi amiga. Nos fuimos pronto, después de la cena, pero estoy agotada. Hoy tengo otro evento, pero por la tarde tengo que estar liada con la uni", termina anunciando, dejando claro que no conseguirá desconectar al 100%.
No encuentra ratitos para descansar
El 2 de junio ha pasado a ser el día más increíble de las vidas de Marta López y Kiko Matamoros. La pareja se dio el 'sí, quiero' en la basílica de San Miguel en pleno centro de Madrid. El colaborador llegó del brazo de su hija, Laura Matamoros, mientras que la modelo lo hacía junto a su padre, que se ha decantado por mantenerse al margen y pedir a su hija que no lo saque en las redes sociales.
La modelo lleva días compartiendo numerosas publicaciones del día más feliz de su vida. Un álbum de fotos inédito en el que hemos podido ver cómo fue la ceremonia religiosa desde dentro, así como la posterior cena en el Hotel Ritz de la capital. Tras disfrutar de un suculento menú, del que detalla todos los platos, hubo una fiesta increíble. Está claro que estará viviendo la resaca de su boda con emoción y desde SEMANA le animamos a que baje de esa nube lo más tarde posible.