Andy y Lucas llevan más de dos décadas en lo más alto de la industria musical de nuestro país. Desde su 'Son de amores', que publicaron en 2003, la agrupación de Cádiz, que anunció su separación el año pasado por un motivo de salud, solo conoce el éxito. De eso ha pasado media vida. Ni Andy ni Lucas son los que eran: unos adolescentes, compañeros del colegio, que tenían el sueño de cantar. Sueño cumplido y millones de discos vendidos. ¿Qué más se puede pedir?
Los gaditanos son dos de los protagonistas del último número de SEMANA, disponible a partir del miércoles 15 de mayo en todos los quioscos del territorio nacional. Hemos hablado con ellos en exclusiva en una conversación íntima que ha dado para mucho. Tanto que Lucas nos ha confesado su intención de pasar por el altar próximamente.
La separación de Andy y Lucas que ha dejado un vacío inmenso en la música de nuestro país
La noticia de la separación de Andy y Lucas el pasado mes de noviembre pilló a todos sus incondicionales por sorpresa. El dúo informó entonces de que decían adiós a su extensa carrera en la música por una razón superior a ellos. Fue durante su última entrevista en 'El Hormiguero', frente a un consternado Pablo Motos, imbatible en la franja horaria de las noches. La razón no es otra que un problema de salud que arrastra Lucas González Gómez. A sus 41 años, el estrés ha hecho mella en su cuerpo, motivo suficiente para decidir alejarse de los escenarios. En principio, para siempre, pero ¿quién sabe?
"Tengo una pequeña válvula y hemos decidido que lo mejor es bajar un poco el ritmo", confesaba Lucas, visiblemente emocionado. La decisión llega acompañada de una gira de despedida, con la que pondrán el broche de oro a su trayectoria. "Ha llegado el momento de hacer una gira de despedida para nuestro público y tomarse las cosas de otra forma, porque sin salud, no somos nadie", señalaban desde el plató de Antena3. El mes de marzo de 2025, todavía sin fecha cerrada, será el momento en el que una de las agrupaciones más conocidas de nuestro país pondrá fin a cerca de 20 años de trayectoria ininterrumpida. Madrid ha sido el lugar elegido para albergar su despedida por todo lo alto de la que no se han desvelado más detalles.
El problema de salud de Lucas que le ha hecho replantearse sus prioridades
La cardiopatía que arrastra Lucas le ha hecho tomarse la vida de otra manera, como nos ha confesado a revista SEMANA en exclusiva. La salud ha sido el motivo que le ha obligado a tomar esta drástica decisión, muy a su pesar, pero no sin antes despedirse como se merece de su público: a lo grande. Lo que iban a ser dos conciertos aislados, se ha convertido en una gira por todo el territorio español con 30 citas confirmadas. Con el cese de sus actividades en la competitiva industria de la música, tanto Lucas como Andy dejarán de lado sus 'alter egos' para dar paso a Andrés Morales y Lucas González, con los que recuperan su versión más cotidiana, íntima y familiar. Lo que más quieren de cara a esta nueva etapa que están a punto de inaugurar el próximo año es pasar tiempo con los suyos. Su objetivo es recuperar todas esas horas que no les han dedicado a sus seres queridos, nos han explicado.
Son grandes planes a los que se suma la férrea intención de Lucas de pasar por el altar con su chica, Mari José. El gaditano lo tiene claro: quiere casarse con su pareja más pronto que tarde. "Hacer más sólido nuestro compromiso, quiero formalizar lo que tenemos", señala. Aunque todavía no tiene una fecha en mente ni se lo ha pedido formalmente a su chica, no quiere que pase mucho más para darse el 'sí, quiero'. Mari José es la mujer que le ha acompañado en los últimos tres años y se ha convertido en su principal apoyo para superar sus problemas de salud, así como superar su inminente adiós de los escenarios. La pareja vive junta en un pueblo cercano a Toledo.
La discreta vida personal de Andy y Lucas fuera de los escenarios
A pesar de su éxito, el grupo gaditano ha sabido mantener en un discreto segundo plano su vida privada. Una intimidad y hermetismo que para ellos es primordial proteger y que cuidan por encima de todo. Lucas es padre de un niño (que se llama igual que él), de cuatro años, fruto de su relación anterior con Soraya, la madre del pequeño.
En el caso de Andy, tiene dos hijos. La mayor, Claudia, está a punto de cumplir la mayoría de edad y la identidad de su madre nunca ha trascendido. El pequeño de la familia es Andy, de apenas cinco años, fruto de su matrimonio con Trini Bueno, con la que se casó en 2018 y se separó tiempo después. En la actualidad, el cantante comparte su vida con Clara, como nos contó a revista SEMANA en una entrevista pasada.
"Es muy buena persona, tiene mucha paciencia y ahí estamos… Pero las heridas profundas no se curan de la noche al día. Aunque estoy mucho mejor, prefiero ser cauto", sentenciaba Andy en alusión al complicado divorcio que protagonizó con su expareja y madre de su hijo hace unos años. Unas palabras que, valga el apunte, compartió estando su chica presente, que le acompañó a la entrevista y con quien demostró una gran complicidad.
La clave del éxito de Andy y Lucas para mantenerse unidos durante todos estos años
Sobre el secreto para mantenerse 20 años juntos, Andy y Lucas lo tienen claro. "Entendernos bien, tener paciencia, saber que este es nuestro trabajo y que nos queremos y somos una familia. Si nos enfadamos alguna vez, reseteamos y ya está. Si las peleas fueran constantes, no podríamos llevar juntos 20 años. Esto, al fin y al cabo, es un hoy por ti, mañana por mí. Yo le digo muchas veces a Andy: 'Quillo, si al final todas las cosas que me dices, te pasan a ti', explicaba Lucas.
"Sí, cuando he tenido problemas, siempre he podido contar con Lucas. Es más, cuando peor nos ha ido, tanto en lo personal como en lo profesional, es cuando más unidos hemos estado, y creo que eso es una de las cosas por las que seguimos juntos. Podemos discutir por cualquier tontería, pero cuando hay algo de peso, siempre está el uno al lado del otro", corroboraba su compañero de faena. Lo dicho: son familia y se apoyan mutuamente. Una postura que han mantenido a la hora de tomar la complicada decisión de separarse en el plano profesional. Porque, en el personal, lo suyo va para largo, como ya han demostrado en dos décadas de vida compartida, dentro y fuera de los escenarios.