Laura Bozzo se colaba en millones de hogares con el estreno de la octava edición de 'Gran Hermano VIP'. La presentadora peruana, que cuenta con muchísimo bagaje en la pequeña pantalla, ha demostrado no tener pelos en la lengua. Ni antes ni ahora. Lo ha vuelto a dejar claro cuando ha entrado en la casa más famosa de la televisión, la de Guadalix de la Sierra. Cuando ni siquiera había pasado una hora desde que ponía su primer pie en la casa ya anunciaba algo: quería abandonar. Un órdago que puso contra las cuerdas al reality y que finalmente no tuvo lugar por sus compañeros, quienes lograron convencerla tras mucho insistir. Pero ¿qué sucedió para que quisiera dar ese paso?
La celebridad peruana se enfadó de manera mayúscula cuando fue descubriendo la nueva mecánica del concurso. Y es que lejos de querer repetir ciertos matices, el formato de Telecinco apostó por un nuevo giro de guion. En el sótano de la casa había algo inesperado, en concreto, una cueva en la que solo iban a convivir algunos de ellos. Esto dejaba ver que solo habría unos privilegiados que vivirían en una casa de lujo repleta de comodidades y otros que deberían de adaptarse a una cueva en malas condiciones.Para decidir quiénes serían los damnificados había una prueba decisiva. Marta Flich, presentadora del programa, les anunció que en el jardín debían encontrar bolas plateadas con el logo de 'GH VIP'. Estas esferas suponían la permanencia dentro de la casa, pero si no las ubicabas "estabas perdido". Un escenario ante el que Laura Bozzo entró en pánico, un temor que pronto se tornó en enfado. Sin pensárselo ni un momento, la concursante puso el grito en el cielo y anunció su salida. "¡Yo me voy! Quiero hablar con alguien de producción", dijo indignada.
Marta Flich no quiso darle pábulo y prefirió centrarse en desvelar quiénes eran las personas elegidas para vivir en la parte menos cómoda de la casa. "Esto no es lo que habíamos hablado", respondía Laura Bozzo, que intentaba confesarse con Carmen Alcayde, quien estaba a su lado. "A mí no me hace falta esto", aseguró. Un cabreo que no acabó en abandono gracias a sus compañeros, que apostaron por la solidaridad y el compañerismo. "Dásela a ella para que no abandone", comentaron entre todos, siendo Michael Terlizzi, un modelo italiano, el que se puso en su lugar.La que quiso aconsejar a Laura Bozzo es Oriana Marzoli. La joven tiene experiencia de sobra en realities, pero no siempre ha salido airosa de ellos. Ni mucho menos. La joven ha abandonado en varias ocasiones programas en España, de hecho, recordemos cuando tan solo 48 horas después de que comenzara 'Supervivientes' tiró la toalla. Una drástica decisión que le hizo aprender y que, sin ningún género de dudas, dejó un gran poso en ella. "Tienes que controlar la ansiedad...Yo tuve una experiencia parecida a la tuya y fui de queen", recomendó Oriana a Laura.