Isabel Preysler y Mario Vargas Llosa han roto su relación y ahora se conocen las verdaderas causas que les ha llevado a tomar esta decisión.
Isabel Preysler y Mario Vargas Llosa están viviendo su Navidad más complicada después de que hayan tomado la decisión de romper su relación después de ocho años juntos. «Mario y yo hemos decidido poner fin a nuestra relación definitivamente», declaraba rotunda la socialité. Además, se desvelaba que la razón de la ruptura podrían haber sido los celos infundados por parte del premio Nobel. Pero ahora se conoce que esta no ha sido la razón principal para que tomen esa decisión.
El círculo cercano de Mario Vargas Llosa ha desvelado que no es así, que la causa de la ruptura ha sido las vidas tan diferentes que tenían. Las personas más cercanas al escrito describen a la pareja "dos personas de mundos muy distintos", declaran a 'El País'. Además, aseguran que hay dos razones claves que llevó a la pareja a tomar la decisión. La primera, las discrepancias en sus estilos de vida y la falta de planes en común.
La expareja "pertenecía a mundos muy distintos"
Además, se atreven a desvelar al medio anteriormente citado qué interesaba a cada uno de ellos: "Eran incompatibles. A él le interesa la cultura y a ella el espectáculo. Hay un abismo entre ambos", reconocen. La segunda de ellas es que Mario Vargas Llosa podría haber empezado a sentirse incómodo viendo "su imagen convertida en un adorno, en un reclamo para fiestas, eventos y hasta para el documental de la hija de Isabel, Tamara Falcó", comentan a 'El País'. A pesar de los intentos de ambos por adaptarse a sus mundos, después de ocho años la cosa no ha dado para más.
Isabel Preysler podría estar ya en Miami con sus hijos
Una pelea el pasado 29 de noviembre entre ellos podría haber sido el motivo que les llevó a tomar la decisión de romper de manera definitiva. De hecho, parece que no hay vuelta atrás. Ya hacen vidas por separado. Tanto es así que tras confirmar la ruptura, Isabel Preysler podría haber cogido un avión para reunirse con sus hijos en Miami. Allí podría refugiarse en la casa de su hija Chabeli Iglesias. El tiempo allí le permitirá también visitar a su hijo Enrique Iglesias y pasar ratos, de esta forma, con los hijos de su hija mayor y del cantante, a los que la socialité no ve con normalidad por residir al otro lado del mundo. Ahora sería el momento perfecto para desconectar del revuelo mediático que ha provocado su ruptura.
La socialité no está atravesando su mejor momento personal. Está viviendo una Navidad triste, ya que no está en compañía de Mario Vargas Llosa, con el que lleva celebrando ocho Navidades. Aún así, tiene claro que es una ruptura que no tiene vuelta atrás. Tal y como han asegurado, la decisión está tomada y no hay vuelta atrás, así como que no ha habido terceras personas.
Los hijos de Mario están felices con la ruptura
Los tres vástagos del genio de las letras intuían que esto podía pasar. Y no solo eso: están encantados con la noticia. Según señalan fuentes cercanas a la familia Vargas Llosa a SEMANA, estos “consideran que han recuperado a su padre”. Creen que «por fin» podrán disfrutar de él sin tener que verle las caras a la filipina, a la que «no soportan». Tanta era la animadversión que sentían hacia la madre de Tamara Falcó que llevaban tiempo deseando que esto sucediera. “La querían lejos de su padre”.