Mila Ximénez rompió su silencio el 16 de junio de 2020 sobre el motivo que le había alejado de los platós. La colaboradora desveló que padecía un cáncer de pulmón, enfermedad contra la que ha luchado hasta el final, tal y como ha revelado su entorno. Tras varios ingresos y tras someterse a diferentes tratamientos, Mila Ximénez ha fallecido este miércoles a los 69 años dejando desolados a aquellos que más la querían. No la han soltado de la mano ni un instante para que sus fuerzas no flaquearan y así lo reveló la periodista en una de sus últimas entrevistas. "Estar cuidada y protegida por los míos es el mejor regalo que he recibido de esta enfermedad. Tengo docenas de manos que no me sueltan", dijo. Sus abrazos la han reconfortado en el que ha sido, sin duda, su momento más duro, de hecho, su familia no se ha separado de ella en las últimas horas.
A su lado ha tenido a su familia, en especial, a sus tres hermanos y a su hija Alba, quien, a pesar de vivir en Ámsterdam, ha viajado para estar junto a su madre cada vez que la ha necesitado. Estos días las visitas eran constantes y se ha podido ver a sus amigos más íntimos en las inmediaciones de su vivienda. Los mismos que la han acompañado a la Clínica de La Luz, donde se ha sometido a una terapia que fuera capaz de frenar su tumor, así como a las salidas fuera del mundo hospitalario que le han hecho desconectar. Ha tratado de ser fuerte y abrazar a la vida que tan feliz le ha hecho durante los últimos años, una actitud positiva que sus apoyos más férreos han querido que mantuviera hasta el final.Pero Mila Ximénez no solo ha tenido a gente de su sangre, sino también a muchos de los amigos que el mundo de la televisión le ha regalado. Después de muchos años en la pequeña pantalla, la colaboradora ha contado en esta batalla con su estilista, Pablo Mallavia, así como con compañeros como Belén Rodríguez, Belén Esteban, Jorge Javier Vázquez, Las Campos y directores de programas como Raúl Prieto o David Valldeperas. Las redes sociales ahora son solo un ejemplo de ello, pues son cientos de mensajes los que se pueden ver en cuestión de minutos en el universo 2.0.
Era querida dentro y fuera de los platós gracias a su profesionalidad y a ser una excelente amiga para aquellos que tuvieron la suerte de conocerla. Todos ellos la han sacado sonrisas y han sido de gran ayuda para hacer de estos doce meses una etapa mucho más llevadera. Mila se ha aferrado a la vida desde el principio y así lo advirtió cuando confesó la enfermedad a la que tocaba enfrentarse. "A mí un tumor no me va a parar la vida. Esto es un reto que me ha puesto la vida y también un obstáculo, pero lo voy a ganar. ¿Quién ha dicho que la vida era fácil?", dijo el pasado año. El camino hasta ahora ha estado repleto de espinas, pero tanto ella como su entorno afirma estar orgulloso de que no haya tirado la toalla ni un instante.
En sus redes sociales incluyó durante estos meses un texto en el que se podía leer cómo habían cambiado sus prioridades. Lanzó un mensaje a sus seguidores y es que su objetivo en la vida no era otro que intentar mejorar: "Mi única biografía es seguir intentando ser mejor".