Este martes, Kiko Rivera ha estallado contra su propia madre. El hijo adorado de Isabel Pantoja, el amado por el clan, y el mediador siempre que había un conflicto familiar ha dicho 'basta'. Lo ha hecho en una inesperada intervención en 'Sálvame', donde ha querido poner los puntos sobre las íes a muchas de las cosas que se están diciendo sobre la cada vez más distante relación con su progenitora. En su discurso, cargado de dolor y de indignación, el DJ ha regalado a la audiencia de Telecinco nueve frases lapidarias que serán recordadas por mucho, mucho tiempo...
1. "Mi madre no sabe diferenciar entre Isabel Pantoja y madre"
Una de las principales quejas del sevillano es que su madre suele comportarse más como una artista que como madre. "Mi tristeza viene porque la persona a la que más he amado y amo, mi madre, no sabe diferenciar entre Isabel Pantoja y madre, esa es mi tristeza", se lamentaba en el programa de Telecinco.
2. "Me he metido en líos familiares por ella y ahora estoy quedando mal"
El andaluz recordaba en directo que en más de una ocasión le ha tocado hacer de pacificador cuando las cosas en la familia se han puesto tensas. "Me he metido en líos familiares por ella y ahora estoy quedando mal cuando le dije que llegase el lunes y no llegó", se lamentaba Kiko en el programa de Telecinco. Sigue sin recibir una visita de Isabel. "Entiendo perfectamente sus motivos. Sé que está cuidando a mi abuela, pero el día tiene 24 horas y vivimos a una hora y media".
3. "No necesito hablar de mi madre"
Kiko ha recordado que los motivos por los que se sentó en 'Sábado Deluxe' hace una semana fue para hablar de sí mismo, de su situación personal, no de su progenitora. "No quiero que sepa que la estoy atacando, porque esto ya se lo he dicho a ella y la que ha hecho esto suyo es ella. Cuando me senté en el 'Deluxe' no no estaba sentado hablar de mi madre, no necesito hablar de mi madre", explicaba.
4. "Necesito a mi madre, no a Isabel Pantoja, y mi madre no está"
Quizás la frase más lapidaria de las que ha pronunciado esta tarde ha sido ésta: "Necesito a mi madre, no a Isabel Pantoja y mi madre no está. Porque el personaje de Isabel Pantoja siempre es más". Más claro, imposible.
5. "Estoy triste por mi madre, no por el dinero"
"Son muchos meses, ojalá… no ataco de mi madre", insistía. "No voy a dejar que se me arrastre por los suelos. No es así, señores... No quiero que penséis que soy una puñetera alma en pena. Tengo mis momentos, no estoy todo el día en mi casa llorando. Pienso mucho. Estoy componiendo canciones... No quiero que penséis que soy una puñetera alma en pena. ¿Que estoy triste? Muchísimo. Decía Pablo Motos que nos está invadiendo la tristeza a todos y yo estoy triste. Y la razón es por el tema de mi madre. No estoy triste por el dinero", subrayaba.
6. "No puedo consentir que se me deje a mí malamente"
"Sí es cierto que a nivel económico estoy peor que hace unos años. Mi mujer, gracias a Dios, me ha enseñado que a veces con menos a veces es más. No quiero hacer daño a nadie, pero lo que no puedo consentir es que se me deje a mí malamente", detallaba.
A sus 36 años, a Kiko le ha tocado afrontar diversos reveses en materia económica. Debido al estado de alarma sus proyectos se han paralizado y eso ha mermado seriamente sus ingresos. Ahora es su mujer, Irene Rosales, quien trae trabajo a casa con su labor en el programa 'Viva la vida', de Emma García. "No necesito más de lo que tengo. Ha habido momentos en que he tenido más de lo que tengo ahora, pero no necesito más”, ha dicho.
Aunque su situación económica actual no es la más boyante, Rivera ha negado que le haya pedido a su madre lo que le corresponde de la herencia de su padre. Aunque ha destacado: “Si yo quisiera pedirlo, estaría en mi derecho”.
Kiko Rivera se ha quejado de que su madre hable de él "a las espaldas", "cosas muy personales" y "dichas a su manera". Así manifestaba su indignación: "Yo estoy sufriendo. Mi mujer está sufriendo". A continuación revelaba un dato que no se conocía. "Se ha hablado de un piso mío de Madrid. Cuando llamo a mi madre y le digo que tengo un comprador para el piso. Me quito la letra del piso y una cosa menos. Mi madre me dice que no: 'Me lo quedo yo. Y yo, en vez de alquilártelo, te pago la letra y es como si lo tuvieras alquilado. Digo: vale'. Y ahora me dice me está pagando el piso. ¿De verdad? ¡Que lo tengo que decir!".
7. "De recuerdos no se puede vivir"
En su intervención en 'Sálvame' también habló de Cantora. Una finca que su madre heredó de su padre, Francisco Rivera 'Paquirri', y que se ha convertido en su refugio. Más aún desde que estalló la pandemia del coronavirus. La cantante apenas sale de su residencia, una finca enorme y alejada de la ciudad que, de alguna manera, aísla a su progenitora. El sevillano cree que su madre debería vivir “en el presente”. Asimismo, añadía: “Si por malas gestiones uno ha cometido sus errores y tienes la posibilidad y la suerte de poder ayudar a la familia, se debe de hacer porque de recuerdos no se puede vivir”.
8. "Si tiene que decir algo que me lo diga a la cara"
"¿Pensáis que yo soy gilipollas? Cualquier que vea esto dirá: ¡Este niño es tonto! Pues no. ¡No es así! Y como ésta hay tropecientas mil. Así que por favor. Dejad ya de pensar que soy un gilipollas, que mi madre se espabile un poco. Si tiene que decir algo que venga y me lo giga a la cara o que lo diga públicamente para que yo me pueda defender".
9. "Hablar así de un hijo no tiene perdón de Dios"
Una de las últimas frases de Kiko al zanjar el distanciamiento con su madre no podía estar más cargado de dolor: "Hablar así de un hijo no tiene perdón de Dios".
Curiosamente, casi al mismo tiempo que Kiko lanzaba tan duras palabras contra su madre, ésta publicaba un avance de su nuevo disco en sus redes sociales. "Y por fin, os puedo enseñar la portada de mi nuevo álbum que se llama: Canciones que me gustan✨
Dentro de poquito os iremos contando más", escribía en su cuenta de Instagram. Y tan cierto que acabará contando más... En cuanto conozca las declaraciones de su hijo en 'Sálvame', seguro que no tardará en reaccionar y en hablar, una vez más, con las cámaras de televisión como testigos.