Máximo Huerta ha abierto su corazón de lleno para desvelar detalles desconocidos de su nueva vida. Y es que lleva ya un tiempo instalado en Buñol, Valencia, hasta donde se fue procedente de Madrid para atender a su madre. Antes incluso de sentarse junto María Casado en el programa 'Las tres puertas', el escritor le ha querido decir que está estupenda justo cuando se encuentra embarazada de 13 semanas. "¿Nunca te has planteado ser papi?", le pregunta la presentadora de televisión.
El escritor le ha contestado con un no tajante: "Me parece una responsabilidad... Ahora es un bebé pero luego será un adolescente, tendrá 20 años, querrá ir a la Universidad. Creo que es una responsabilidad ser padre", le responde Máximo Huerta. Tiene claro que no quiere ser padre, pero reconoce que hubiese sido uno de los buenos: "Lo de educar no me pone y eso que yo quería ser maestro. Tuve un profesor, don Melchor, que me marcó mucho. Yo creo que hubiese sido buen padre. En esta vida no sería padre. Ahora sería un padre muy mayor", sigue explicando.
Reconoce que ahora sería un padre mayor
María Casado, que está disfrutando de su primer embarazo, le ha asegurado que la edad no importa, que ella tendrá a su hija Daniela con 45 "y es una maravilla". El escrito le ha respondido que eso le da felicidad y cierta envidia: "Me da un poco de envidia verte feliz ahora que estás embarazada".Ahora está centrado en cuidar a su madre. Para ello ha dejado Madrid y se ha vuelto a su pueblo, donde por cierto abría una librería, 'La Librería de Doña Leo'. No solo se está ocupando de su negocio, también de su madre, con la que está muy unido: "Me tiene a mí, aunque a veces no sepa que soy yo. A veces no le puedo calmar el dolor", dice con tristeza.
Unos cuidados que lleva a cabo junto a su pareja
Ha querido compartir con María Casado el doloroso momento que vivió en las últimas Campanadas cuando estaba con su madre precisamente en casa: "Cuando comenzó el 2023 mi madre me dijo 'qué pena que mi hijo no esté aquí'. Se fue a la cocina y me llamó yo estaba en el salón, le cogí el teléfono y le conté que estaba en una fiesta. Es mejor mentir. Cuando volvió me dijo 'Rafa, porque para ella soy su hermano, está en una fiesta pero está bien'... He sido su cuidador siempre", ha explicado emocionado.
Ahora le toca estar allí, al lado de su madre, a la que adora: "Tengo la ayuda de mi pareja, voy a la psicóloga, tengo buenas amigas y buenos colegas que me rodean y me sacan para respirar, pero te sientes mal. Como cuidador piensas que se va a ir en ese rato que tú no estás", ha declarado con tristeza. Pero ahora toca esto, estar en su pueblo y al lado de su madre. Parece que Madrid ahora solo es para visitarla: "En Madrid hay mucho ruido, y ahora me molesta. La vida la he gastado, el pueblo me da paz y estoy mejor".