Joana Sanz. vive un infiero desde que su marido, Dani Alves, entró en prisión hace varios meses. Así lo ha declarado en incontables ocasiones. El futbolista está en la cárcel de Brians 2 tras ser acusado de una presunta agresión sexual a una joven de 23 años. Aunque él se ha declarado inocente de los hechos ocurridos en los baños de la discoteca Sutton, de Barcelona, sí ha admitido que mantuvo relaciones sexuales con la denunciante. La confirmación de su infidelidad a la modelo ha sido motivo suficiente para ella haya declarado que tiene la firme intención de divorciarse de su todavía marido. Incluso, ha iniciado todos los procesos legales. Sin embargo, no le está resultando nada fácil materializar la separación.
"Él le está poniendo todas las trabas a Joana Sanz"
La noticia la daba hoy Marc Leirado en el programa 'Así es la vida', de Telecinco, presentado por Sandra Barneda. Según el colaborador, Alves no está aceptando las condiciones del divorcio y "está poniendo todas las trabas posibles para que no se lleve a cabo". Leirado, quien aseguraba haber hablado con la modelo, explicaba que ella tiene claro que se va a divorciar tarde o temprano, pero es el futbolista quien está retrasando los trámites."Alves sigue afirmando que Joana es la mujer de su vida y no se va a separar", sentenciaba. Con estas palabras, se pone un alto a las especulaciones sobre la determinación de la modelo de disolver el matrimonio. Algo que a lo que ella ha aludido en incontables ocasiones.
Las polémicas declaraciones de Alves
El 21 de junio se difundía la primera entrevista que Dani Alves concedida a un medio de comunicación. En esta, volvía a declararse inocente de las acusaciones, aunque se reafirmaba en su infidelidad a Joana. "También hablo para pedir perdón a la única persona a la que tengo que hacerlo. Están siendo días duros para ella y le agradezco todo lo que está haciendo por mí. No es fácil su papel. Tengo la certeza de que no me equivoqué al elegir a Joana como mi mujer, aunque quizás ella sí se equivocó conmigo", reconocía.La reacción de su mujer no se hacía esperar. Muy enfadada, aseguraba que no entendía por qué había roto su silencio. De nuevo, el foco mediático volvía a recaer en ella y la modelo salía en su defensa para que la dejaran en paz.