Diego Arrabal ha hecho una excepción. Desde que ingresara por coronavirus en el hospital y viviera una auténtica pesadilla por su enfermedad, se ha confesado a través de sus redes. El paparazzi después de pasarlo muy mal y desvelar que no puede más, se ha dirigido a su esposa, con la que tiene un niño de siete años. Aunque nunca ha querido dar demasiados detalles de ella, el fotógrafo ha utilizado su Instagram para gritar al mundo lo importante que es para él y lo ha hecho con una carta pública que sus seguidores han aplaudido sin cesar. Llena de sentimiento y de halagos hacia ella, Diego ha demostrado así su lado más romántico.
Convertida en su apoyo más férreo, desde su encierro hospitalario Arrabal se siente frágil, por lo que quiere aprovechar cada instante para decirle a su familia lo importante que es para él. "Ahora soy capaz de ver cuáles han sido tus súper poderes durante todos estos meses: el poder ver el peligro antes que nadie, la habilidad de multiplicarte... Así podría estar horas y horas. Después de 365 días de aprendizaje, me gustaría subrayar lo más importante, esa que nunca abandonaste: tu sonrisa. Ríete de todo lo que quieras, te lo puedes permitir. Por eso, yo ya no creo en los súper héroes, sino en ti", dice Diego Arrabal. Virginia, que es como así se llama, está etiquetada en la publicación y, además, aparece en una fotografía que él mismo ha adjuntado. En ella se ven pocas pistas de esta misteriosa mujer, pero sí se evidencia que le gusta posar para su marido y que es una amante del mar como Diego Arrabal.
Tras dedicarle también dos bonitas canciones en su perfil, muchos de los followers del colaborador de 'Viva la vida' han ovacionado sus palabras, ya que eran inesperadas para todos. No están siendo unos días fáciles para él, quien, además de estar ingresado en una clínica, está separado de su familia como el resto de enfermos. Antes de contagiarse, recibió una sorpresa por parte de su madre, quien está en una residencia y a la que estaba deseando abrazar. Desde el magazine de fin de semana en el que trabaja, le sorprendieron y consiguieron emocionarle. "No me lo esperaba, son momentos difíciles personalmente y al final como uno cualquiera, esta pandemia nos ha separado de las personas que nos necesitan y que nosotros necesitamos de ellas. Es muy triste y siempre lo digo, a todos nos está dando fuerte pero esta generación es la que menos se lo merece, han pasado tanto…", dijo el fotógrafo.
El fotógrafo no pretende ser abanderado ni ejemplo de nada, pero sí desvelar cómo está siendo su experiencia con este virus que tantas vidas se ha llevado por delante. «Quizás no sea ejemplo de nada ni de nadie, pero me sale del corazón deciros que este virus no es broma. Llevo trece días con el virus y anoche me tuvieron que ingresar. Lucharé hasta que no me queden fuerzas para curarme. Pero ahora me hago una pregunta: ¿por qué no luché igual de fuerte para no contagiarme?», dijo hace tan solo unos días. Deseoso de recibir el alta, el paparazzi, además de explicar cómo se siente, aplaude la labor que todos los sanitarios hacen día a día para vencer esta complicada enfermedad que ha supuesto un antes y un después en nuestras vidas. Su hermana es para él «un héroe» y así lo explicó en sus redes. "Podría ser un sanitario más, un héroe más, pero no, es todo esto y mucho más. Qué orgulloso estoy de ti hermana, te has reinventado. Te lo dije hace años. Tú no tienes límites. Enhorabuena por todo lo que estás demostrando", escribió junto a una fotografía de ella.