La fría reacción de Alessandro Lequio a la llegada de la hija de Ana Obregón a España

La llegada de Ana Obregón a España con su hija es la noticia del día. La presentadora ha aterrizado este miércoles en Madrid con su hija Ana Sandra. Su llegada al aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas ha provocado un enorme revuelo. Y es que la madrileña ha salido de la terminal con su niña en brazos y rodeada de numerosas personas que velaban por su seguridad. Al conocer la noticia sobre la llegada a Madrid de la pequeña, Alessandro Lequio se ha pronunciado en el plató de 'El programa de Ana Rosa'. "No tenía ni idea de que llegaba hoy, pero bienvenida", ha reaccionado, con el rostro serio.

Desde que conocimos el nacimiento de Ana Sandra, Alessandro Lequio ha dejado claro que no hablará públicamente sobre este asunto. Este miércoles, fiel a su postura, el colaborador se ha negado a hacer más declaraciones sobre la pequeña. No quiere hablar de ningún tema relacionado con su hijo Aless, fallecido el 13 de mayo de 2020 como consecuencia del cáncer.

Entre las pocas declaraciones que ha hecho el italiano sobre la hija de Ana Obregón cabe recordar la respuesta que le dio a Cristina Tárrega el pasado 19 de abril cuando esta le preguntó si deseaba conocer a la niña. "¿Te apetece conocer a esta niña?", le preguntaba la periodista. Y él contestaba con un brevísimo: "Me gustan los míos". 

Fue el pasado 4 de mayo cuando la propia Ana Obregón hizo correr ríos de tinta al desvelar lo que muchos imaginaban tras conocerse que había sido madre: su hija Ana Sandra es, además, su nieta, ya que nació gracias a la aportación de esperma que su hijo Aless hizo antes de morir. “Legalmente es mi hija, pero también es mi nieta, porque es hija de Aless”, dijo en 'Hola'. Al parecer, el joven manifestó su expreso deseo de ser padre aún después de su desaparición. Y ha sido la actriz quien ha hecho realidad el sueño de su hijo.

La niña, que nació el pasado 20 de marzo en el Memorial Regional Hospital de Miami, aún no conoce a Alessandro Lequio. La gran incógnita ahora es saber cuándo y dónde se producirá el esperado encuentro entre el abuelo y su nieta. Todas las miradas están puestas en él. ¿Se animará a acercarse al domicilio de Ana para ver por primera vez a la niña? Es la pregunta que muchos se formulan. Solo el tiempo dirá si Lequio accederá a conocer a la pequeña, por cuyas venas corre sangre de su querido vástago, fallecido hace ya tres años.