Cuando se propuso a la familia de Mario Biondo un documental sobre sus últimos días no lo dudaron. Desde su sorpresiva muerte han peleado por saber qué pasó el día de su fallecimiento y esta era una herramienta para hacerlo. Querían llegar hasta el final y contar al mundo el camino recorrido hasta ahora, pero jamás imaginaron cuál sería el resultado. Decepcionados tras visualizarlo, pues consideran que "ha sido un lavado de imagen de su viuda", se han puesto manos a la obra. Tanto sus padres como el perito judicial Óscar Tarruella denunciarán a Netflix y a los productores del proyecto, entre ellos, a Guillermo Gómez, quien fue representante de Raquel Sánchez Silva, por utilizar sus entrevistas sin su permiso. Y es que justo cuando supieron quién estaba detrás les desautorizaron, una negativa al que han hecho caso omiso, ya que los tres aparecen en 'Los últimos días de Mario Biondo'.
La familia de Mario Biondo, muy decepcionada
"Mi equipo letrado está estudiando todo, pero va a haber demanda. No solo por el uso de imágenes...Son demandas individuales, cada uno pondrá lo suyo. Lo que sé es que familia como otros profesionales a los que han editado cómo les ha dado la gana para que parezcamos unos conspiranóicos locos...Que se atengan a las consecuencias. Yo siempre digo que si nos tienen que indemnizar eso solo será un simple arañazo en su bolsillo. Estoy convencido de que la justicia nos dará la razón", comienza diciendo Óscar en conversación con la revista SEMANA. Están convencidos de que no quedarán en buen lugar, pues tienen pruebas de todo lo que dicen y de cómo se gestó la negociación de esta docuserie que ahora está en boca de todos. Eso sí, hay algo que a Óscar le tranquiliza: los padres de Mario no enseñaron ninguna de las pruebas recabadas en la nueva investigación durante las grabaciones.
Los tres capítulos, que están disponibles desde el 3 de agosto, ofrecen una versión con la que ni los padres de Mario Biondo, ni tampoco sus hermanos están de acuerdo. No creen que el cámara se suicidara, sino que fue asesinado. Son numerosas las pruebas que no cuadran y por las que aseguran que lucharán hasta el final. Tanto es así que de forma paralela a la vía legal, también planean que su visión llegue a la televisión en forma de documental. Aunque todavía no hay ninguna oferta en firme, lo cierto es que están en conversaciones y, sobre todo seguro, de que todo llegará a buen puerto. El criminólogo Óscar Tarruella lo explica a este medio: "Oferta no hemos recibido, pero hay gente muy interesada y gente con la que se está hablando. Primero estamos en agosto y segundo no queremos distraernos del foco. Se irán teniendo esas conversaciones en paralelo a las acciones legales que se van a iniciar, obviamente estas plataformas querrán ver las resoluciones judiciales. Tarde o temprano habrá otro documental, pero de verdad, cómo se hacen los documentales". Se desconoce en qué plataforma será, pero lo cierto es que ellos darían luz verde a un proyecto así.
"La investigación privada sigue en marcha"
Nos asegura que jamás se ha dejado de trabajar en este caso de forma privada, una investigación que a día de hoy continúa, a pesar de que el caso ha sido cerrado tanto en Italia como en España. "No hemos dejado de trabajar en ningún momento. La maquinaria no se ha parado nunca, aunque ellos se piensen que si. La investigación privada sigue en marcha hasta que no se abran unas diligencias, su señoría será quien determinará qué unidad de investigación se encargará. Policía Nacional o de la Guardia Civil", aclara. Además, lanza de nuevo un tirito a la elaboración del documental de Netflix, el cual define como "solo palabrería" e "inexistencia de pruebas y testimonios". ¿Cuándo llegará el nuevo documental? De momento, habrá que esperar.