El alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida (48 años), y su novia, Teresa Urquijo (27 años), se convertirán en marido y mujer el próximo 6 de abril en una ceremonia religiosa celebrada en Madrid tal y como adelantó SEMANA en exclusiva. Un gran paso en su relación que él mismo confirmaba días después a través de sus redes sociales: "Una vez me preguntaron por cuestiones sentimentales. Respondí que ni precipitarse ni resignarse, es obvio que no me he precipitado pero estaba casi resignado. Hasta que apareció ella. Y Teresa me ha dicho sí". Así, la pareja pasará por el altar en cuestión de tres meses y el político del PP ha querido dejar claro "que no me voy a distraer con la boda, se lo aseguro a los madrileños.
Ha sido en su intervención en 'Madrid Directo', donde ha hablado con Nieves Herrero sobre actualidad política y de lo que depara el año 2024 a la ciudad y a él mismo. Sobre su boda, aunque tiene claro que "es un día muy importante y creo que un día esperado", aún queda tiempo: "vamos partido a partido. Quedan tres meses, queda mucho por hacer".
El alcalde es consciente del interés que suscita su enlace, además de la preocupación de los madrileños por si le causa una 'distracción'... "Las cosas son así, uno es un personaje público, en mi caso es un honor, no una carga, ser alcalde de Madrid", señala Almeida, y añadía: "Soy tremendamente respetuoso, tímido, me cuesta hablar de estos temas pero agradezco las enhorabuenas, el cariño que recibo de gente por la calle pero esto no me desvía, aquí hay que trabajar cada día".
Pero si algo ha sorprendido a los oyentes ha sido la confesión de Almeida, que reconoce que cambiará tras convertirse en un hombre casado: "Tendré que dejar algunos vicios a mis 48 años de vida como es esa nevera vacía, me tendré que poner las pilas".
Todos los detalles de la boda de José Luis Martínez Almeida y Teresa Urquijo
Según indican a SEMANA, tras la ceremonia religiosa, los novios y el resto de invitados acudirán a la finca ‘El canto de la cruz’, en el término municipal de Colmenar Viejo, propiedad de la madre de la novia. Situado a tan solo 30 minutos de Plaza Castilla, en Madrid, este enclave ha logrado convertirse en un oasis de la hípica, pues cuenta con instalaciones de alto rendimiento y, además, es apto para concursos de equitación. Tal es la cosa que se ha llegado a poner a disposición de federaciones incluso y actualmente tienen una conocida yeguada llamada Flor de Lis Horse Trial. Detalles que evidencian que no es un lugar cualquiera.