El DJ está inquieto por lo que pueda pasar en los próximos meses. Por ello, ya piensa en reciclarse y dar un giro a su carrera para buscarse "las papas".
Kiko Rivera ha confesado cómo está pasando estos días de parón. Para ser exactos, ha hablado de cómo la está sobrellevando, porque la verdad es que al hijo de Isabel Pantoja estar dentro de cuatro paredes se le hace bastante cuesta arriba.En una entrevista en directo en 'Sálvame', el DJ ha contado que pasar tanto tiempo en su residencia ha hecho que su gota empeore. "Hoy me encuentro mejor de la gota, pero estoy fatal de la rodilla. Uno está saliendo menos y se nota. Me duele muchísimo. Estoy harto", admitía.Ahora que no puede salir de su hogar por culpa de la enfermedad que ha paralizado al planeta, el sevillano permanece en su domicilio de Castilleja de la Cuesta, en Sevilla, junto a Irene Rosales y las dos hijas de la pareja. Allí procura matar el tiempo y pasarlo lo mejor posible, pero no siempre le resulta fácil. "He visto series nuevas, series antiguas, me he abierto un canal de Youtube. Ya no sé qué hacer, me estoy volviendo loco", explicaba, con mucho sentido del humor, a Jorge Javier Vázquez.
"Con Irene lo llevamos bastante bien"
Al músico, productor y pinchadiscos no le cuesta, en cambio, pasar mucho tiempo con su mujer. "Con Irene lo llevamos bastante bien. No discutimos mucho. Son 24 horas con mi mujer. Es como volver a 'Gran Hermano'. Lo llevo bastante bien", admitía.Las que mejor están son sus hijas. Estar en casa con sus padres es el sueño para la mayoría de los pequeños, aunque también empiezan a tener ganas de salir a la calle. "Las niñas tampoco nos dan tiempo para mucho. Las pobres están 'desesperaítas' por salir. Pero hay que quedarse en su casa. Veo videos de la gente que salen y hacen bbq y eso no se puede hacer", decía en el programa de Telecinco. "Si me llega a pillar de más joven lo que tendría en mi casa seria una 'jartá' de mierda. Si me pilla más joven me muero".
"Hablo todos los días con mi madre"
Como tiene tiempo libre, está más pendiente que nunca de su progenitora. "Todos los días hablo con mi madre. Se nos ha subido ese cariño hacia las personas". Ayer, sin ir más lejos, hizo una videollamada con toda su familia. En ella participó su hermana Chabelita. "Estuvo hablando con las niñas, con Albertito. Al final es lo que tenemos. Las videollamadas, no poder abrazar a la gente que quieres".Kiko cree que debemos seguir haciendo un esfuerzo y permanecer en casa, tal y como indican las autoridades. "Hay que hacerlo por un buen mundial. Todo el mundo de una".