Tamara Falcó ha desatado una oleada de comentarios no solo por la manera en la que ha gestionado públicamente su ruptura con Íñigo Onieva. Sus recientes declaraciones en el Congreso Mundial de las Familias 2022 en México han sentado muy mal en diversos sectores de la sociedad española, que han criticado muy severamente sus palabras sobre la sexualidad en el foro católico. De un día para otro ha pasado de ser aplaudida y halagada por todos por cómo ha afrontado las infidelidades de su ex a estar en el centro de las miradas por sus opiniones sobre la diversidad sexual. («Ahora estamos viviendo un momento muy complicado para la humanidad. Hay tantos tipos distintos de sexualidades. Hay tantos sitios distintos donde se puede ejercer el mal», ha dicho). Ante este panorama, Juan del Val, compañero suyo en 'El Hormiguero', ha salido en su defensa.
"Menos de una semana después todo el mundo abandona el barco. Unos días han bastado para pasar de considerarla una heroína a la reaccionaria de la que hay que huir", arranca diciendo el escritor y colaborador de Antena 3 en sus redes sociales. "Hace una semana que una panda de cursis se manifestaban miembros del #teamTamara #todossomosTami y demás gilipolleces para apoyar a una persona cuyo único mérito en esos días había sido sufrir una infidelidad. Cientos de señoras y algunos señores me vapulearon en redes por “meterme con Tamara” y no ser lo suficientemente empático con una compañera que estaba sufriendo. Me la comí, aunque nada de eso sucediera. Gajes del oficio".
"Tamara ha ido a un foro ultracatólico a decir lo que piensa y la gente ha sobreactuado para llevarla a la hoguera", dice Juan del Val
"Ahora, cuatro días después, todo es distinto. Tamara ha ido a un foro ultracatólico sobre la familia tradicional a decir lo que piensa (o no, porque yo no he entendido bien lo que ha dicho como me sucede algunas veces) y la gente ha sobreactuado para llevarla a la hoguera como hace unos días destrozaron al novio infiel y elevaron a los altares a una mujer por el simple hecho de haber sufrido una infidelidad", continúa diciendo en su perfil de Instagram. "Algo que le ha pasado a “casi” media humanidad y a la otra “casi” media, aunque no se haya enterado".
"Yo nunca he estado en el #teamTamara que se creó hace unos días, por eso no tengo que abandonar el barco del que ahora saltan todas las ratas. Tamara y yo estamos en las antípodas ideológicas, ni pensamos ni sentimos igual, pero le tengo cariño después de dos años siendo compañeros, y la respeto como respeto a todo el mundo, piense como piense y sienta como sienta. Hay una cierta paradoja en esta historia que a ella y a mí nos separa y nos une. Yo he formado una familia tradicional, estoy casado con la misma mujer con la que vivo desde hace veinticuatro años y con la que tengo tres hijos sanos, estudiosos y que hablan perfectamente inglés. Sin embargo, respeto profundamente a otras familias que son distintas, nada tradicionales como, por ejemplo, la suya", prosigue.
"La clave es el respeto", explica el colaborador
Por último, concluye: "La clave es el respeto, el respeto siempre, no solo cuando conviene estar donde más calienta el sol para luego huir cuando ya no te conviene. Yo soy ateo, pero sé lo que es la caridad cristiana. Otra paradoja. Siempre hay que estar con el más indefenso. Por eso, desde mi discrepancia con ella, yo hoy sí apoyo a Tamara".