Aunque 2020 quedará marcado como uno de los años más difíciles para Juan Avellaneda, su positivismo le ha obligado a no rendirse y a continuar luchando. Todo un reto si tenemos en cuenta los caminos difíciles que está atravesando el diseñador. Tras superar un cáncer de testículos, el exparticipante de MasterChef revela a SEMANA cómo ha afrontado todos estos reveses, nos cuenta como es en la intimidad y nos habla de su íntima amiga Tamara Falcó, y todo esto en su espacio íntimo, en el que el modisto pasa su día a día.
No están siendo precisamente unos buenos meses, ¿verdad Juan?
No. La verdad es que está siendo todo un poco complicado ¿Sabes lo que pasa? Creo de todo lo que estamos viviendo es totalmente inédito. Esto es, cada día una noticia nueva, cada día pasan cosas tristes, ahora mismo, por ejemplo, se me ha muerto una persona que llevaba la producción de la marca… Ha sido un shock. Yo que soy muy positivo e intento quitar hierro a todo, claro que hay momentos que te producen colapso.
¿Qué balance haces especialmente de este año?
Siempre intento ser positivo y la verdad, es que aunque ha sido duro, también ha sido muy positivo, porque ha sido un año que me ha obligado a frenar, a relativizar algunos temas, me ha obligado a ser consciente de lo que tengo… Por ejemplo, con mi pareja estoy encantado. Estar encerrados ha sido una prueba de fuego, pero ha sido algo que nunca había hecho por trabajo. Aunque ha sido un año trágico, si hago balance, ha sido un año muy positivo.
¿Cómo te apañaste los meses que tuvimos que estar encerrados en casa?
¿Sabes qué pasa? Me dije que tenía que aprovechar el tiempo. Estudié unos cursos que hacía tiempo que quería hacer, me puse a hacer yoga… Creo que ante cualquier situación en esta vida te puedes venir arriba o te puedes maltratar a ti mismo, entonces yo intento, aunque no es fácil, hacer un esfuerzo y sacar la parte positiva de esa situación que es horrorosa.
Además, te descubrieron cáncer de testículos.
No se lo conté a nadie porque en casa estaban pasando por eso, entonces ¿para qué iba a preocuparlos? Es un instinto de protección hacia los míos. Lo comuniqué a toro pasado, porque aun estaba con revisiones y no me sentía cómodo del todo. Quise esperar a que todo estuviera bien. Cuando lo conté me di cuenta de que con mi testimonio podía ayudar a mucha gente, sobre todo al hombre. Estamos acostumbrados a que el cáncer de mama tenga más visibilidad, en parte porque ellas se cuidan más, pero al hombre no se le ha educado en ese aspecto.
¿cómo te lo detectaron?
De repente noté un bulto en un testículo. Al principio dije “esto es una chorrada”, pero justo en ese momento estaban operando a mi madre de un cáncer de pecho y recordé que cuando a mi madre le salió el bulto le regañaba por no acudir al médico. Total, que a lo meses ella ya estaba en el quirófano y eso me hizo reflexionar sobre lo que estaba teniendo yo y se me encendió la alarma. Entonces fui al médico, me lo miraron y a los cuarenta y cinco minutos de salir de la consulta me llamaron y me dijeron: “Hola Juan, acabas de estar en consulta y ha pasado esto...”
¿Cómo te lo detectaron?
De repente noté un bulto en un testículo. Al principio dije “esto es una chorrada”, pero justo en ese momento estaban operando a mi madre de un cáncer de pecho y recordé que cuando a mi madre le salió el bulto le regañaba por no acudir al médico. Total, que a los meses ella ya estaba en el quirófano y eso me hizo reflexionar sobre lo que estaba teniendo yo y se me encendió la alarma. Entonces fui al médico, me lo miraron y a los cuarenta y cinco minutos de salir de la consulta me llamaron y me lo dijeron.
¿Cómo reaccionaste?
Me quedé bloqueado. Empecé a negarlo. Me pidieron regresar para hacerme una radiografía y me inventé mil excusas para retrasarlo. Durante las tres primeras horas, después de la llamada, se me fue la olla. Es que no tenía información. Después de la radiografía me dijeron que el bulto era pequeño, que gracias a dios me lo habían cogido muy al principio y que solo era una pequeña intervención. Me lo quitaron, y a partir de ahí me tocó hacer revisiones diarias. Cada vez que acudía a una de estas citas rezaba porque no se hubiera regenerado, porque claro, era algo que yo ya había vivido en casa.
¿Cómo es Juan Avellaneda en la intimidad?
Te puedo decir que soy bastante casero, adicto al trabajo y muy creativo.
¿Eres de esos diseñadores que tienen su taller en casa?
No, porque no me dejan. Lo he tenido durante mucho tiempo, pero ya no. No es sano. Yo era de los que no podía dormir y me metía en el taller a las dos de la mañana. Ahora solo tengo mi mesa de trabajo con mi ordenador. No puedo hacer grandes cosas desde aquí, pero tengo la suerte de dedicarme a lo que realmente me apasiona, porque yo no estaba destinado, aunque siempre he querido, a hacer todo esto.
¿Porqué dices que no estabas destinado?
Bueno, porque mis padres insistieron mucho para que yo hiciera algo que no fuera moda. Es algo que hacen muchos padres como protección, porque se piensan que con las profesiones que tienen que ver con la creatividad no se gana ni un duro y no querían que nosotros sufriéramos. Yo me saqué la ingeniería informática lo más rápido que pude para quitármelo de encima y que ellos estuvieran contentos.
¿Cuál es tu secreto para superar esta crisis?
Como he tenido un tiempo de pausa para pensar, he llegado a varias conclusiones. Al final intento ponerme siempre en la parte del consumidor. Analizo cómo consumo yo moda. Entonces, ¿ahora mismo que te comprarías? Pues camisas, pijamas, como mucho alguna joya… Entonces empecé a potenciar mucho esa línea y la verdad es que hemos incrementado mucho las ventas. Afortunadamente estoy pasando un buen momento y espero que sea así durante mucho tiempo. Al final, cuando no te han regalado nada, sabes lo mucho que cuesta llegar hasta este momento.
¿Cómo es Tamara Falcó?
Tuvimos una conexión que ha durado hasta el día de hoy. De hecho, también me acaba de mandar una cesta por navidad. Es una especie de amor a primera vista, pero sin la connotación sexual. Es algo muy puro y sano. Es bonito. Creo que con nuestra edad, establecer amistades tan fuertes no es fácil. Con ella me parto de risa, nos entendemos, nos apoyamos… Ella es el mejor regalo que me he llevado hasta este momento.
¿La has felicitado por su título de marquesa?
Me alegro tanto de que el padre le haya dejado esto… Al final es un regalazo. Que te dejen un legado me parece un gesto de amor. Me parece, por parte de él, un detallazo. Lo conocí y era un gran señor.
¿Qué le has pedido a este 2021?
Deseo tranquilidad mental para todos. Todos vivíamos planificando el futuro y ahora todo eso ha cambiado. Tenemos que disfrutar el presente.