Hace algunos meses Teresa Rivera explicó que su marido estaba enfermo, sin embargo, pocos detalles más trascendieron sobre el problema de salud al que él estaba haciendo frente. Ahora ella y su hijo José Antonio Canales hacen frente a su muerte, un durísimo varapalo del que intentan recuperarse. Ambos han reaparecido destrozados y ya se han podido despedir de él en el tanatorio de Cádiz, siendo ahora cuando son conscientes de lo sucedido. Muy amables y tratando de ser lo más sinceros posibles con los medios de comunicación, madre e hijo se han confesado por separado sobre cómo se encuentran. Y es que el último año ha sido muy difícil para los dos, pues el padre de familia estaba muy enfermo, por lo que han visto cómo se apagaba poco a poco.
Tanto el diestro como su madre prefieren pensar que "ya está descansando" tras una etapa muy difícil y procuran apoyarse el uno en el otro. "No estamos ninguno bien, pero estas cosas son así y afortunadamente ha sido todo muy rápido y ya está, por lo menos ya está descansando", ha dicho Canales, admitiendo que esta última etapa no ha sido ni mucho menos la mejor para él. Los últimos meses no han sido para nada fáciles y es que cabe recordar que, además de este fallecimiento, Teresa y José Antonio tuvieron que despedirse para siempre de Riverita el pasado mes de enero. El hermano de Teresa falleció a los 75 años, dejando desolado a su entorno y con una herencia que, a día de hoy, sigue generando mucha polémica en su círculo más cercano. En especial, en lo que se refiere a José Antonio Canales, ya que hay quien apunta a él como heredero universal.
Vídeo: Europa Press
Vídeo: Europa Press
Quien también ha admitido la tristeza en la que están sumidos es Teresa Rivera. La hermana de Paquirri intenta ser positiva y mostrarse fuerte en la medida de lo posible, declaraciones que podrás ver en su totalidad en el vídeo que te ofrecemos en este artículo. Ella y su entorno quieren hacer piña para intentar que la ausencia de su marido sea lo más llevadera posible dentro de lo que cabe. Se apoyan el uno en el otro para superar este tremendo golpe y han insistido en que agradecen a todos el cariño que le están brindado tras su muerte. Rotos de dolor, procuran que les arropen aquellos que más les quieren y no entrar en guerras que no hagan si no dificultar su día a día.