Joaquín Cortés lleva varios meses sin pagar el alquiler de su casa de Portugal, por lo que ya tiene fecha de desahucio.
Joaquín Cortés tiene una deuda contraída con la casa que tiene alquilada en Portugal de más de 40.000 euros. El bailaor está denunciado por impago, siendo hace 18 meses cuando dejó de pagar las mensualidades de la vivienda de lujo en la que reside. Aunque el asunto se encuentra en los juzgados, ambos se defienden con sus respectivos abogados. El artista asegura estar tranquilo y tanto él como su esposa se justifican diciendo que el inmueble no estaba en buenas condiciones. Según ellos, tuvieron humedades y termitas, pero el casero no dio ninguna solución. Las versiones son contrapuestas hasta tal punto que ya hay fecha de desalojo para Joaquín Cortés y su familia. "Durante estas semanas intenté hablar con Joaquín. Le envié mensajes para que pagara la deuda y evitara el escándalo de ser desahuciado, pero vio los mensajes y nunca respondió", dice el dueño del inmueble. De este modo, se confirma que no han llegado a un acuerdo.
El 29 de abril Joaquín Cortés será desahuciado
Es el próximo 29 de abril cuando se extingue el contrato de arrendamiento y cuando está previsto que Joaquín Cortés y su familia sean desahuciados. Sigue sin pagar, por lo que irá a juicio y de nuevo se verá salpicado por el escándalo, un problema que él puso en manos de su letrado hace meses. Fue hace tan solo unas semanas cuando el bailarín reapareció frente a los medios, siendo en ese momento cuando los periodistas le preguntaron por la batalla a la que se enfrenta. "No tengo nada que decir sobre la polémica de la casa que tengo alquilada, ya están mis abogados en ello. Se va a aclarar todo", dijo sobre este problema judicial por el que está contra las cuerdas. En la actualidad continúa residiendo en la vivienda, eso sí, ya no cuenta con todas las comodidades de cuando la alquiló. Actualmente no tiene gas, ya que este fue cortado tras una inspección de la empresa, pues los inquilinos no abrieron la puerta, según ha publicado el diario portugués Correio da Manhã este jueves.Joaquín Cortés y su pareja, Mónica Moreno, admiten que han contraído esta deuda, pero insisten en que la casa no estaba en condiciones óptimas. «¡Fue horrible! ¡No tenían la casa en buenas condiciones! Durante días no pudimos dormir en nuestra habitación, porque había muchos bichos, luego productos tóxicos… fue una experiencia horrible”, comentó la pareja del coreógrafo. Ambos confían en que sus representantes legales lleguen a un acuerdo beneficioso y él consiga abandonar este escándalo sin demasiado ruido mediático, pero este deseo apunta complicado.
Sus otros problemas económicos
No es la primera vez que Joaquín Cortés se ve en un embrollo económico. Cabe recordar que cuando era propietario de una casa situada en el madrileño barrio de Lavapiés fue denunciado por sus vecinos por no pagar los gastos de comunidad. Debía más de 30.000 euros ya que desde hace años presuntamente no abonaba ni el agua ni la calefacción y, además, se negaba a hacerse cargo de las derramas aprobadas en la junta de vecinos. Mensualmente se tenía que hacer cargo de 180 euros al mes, pero al no hacerlo durante varios años, provocó que fuera llevado al Parlamento Europeo. Esta deuda choca frontalmente con las características de su casa, la cual aseguraron sus vecinos, rezumaba lujo en cada rincón. "Realizó obras faraónicas y unió los dos pisos. Incluso, tiene un ascensor dentro de la casa porque su madre no goza de mucha movilidad", dijeron en su día. Años después se deshizo de ella.