Jessica Bueno ha iniciado una nueva vida en Bilbao desde que pusiera punto y final a su relación con Jota Peleteiro. Ahora está centrada en su faceta de empresaria y modelo. Fue su ex marido el que devolvió su nombre a la prensa señalándola en una salida con un amigo, Pablo Marqués, y una frase demoledora. "Ahora me toca mantener a dos palanquines", comentaba hace menos de quince días. La modelo decidió mantenerse en un segundo plano, más allá de las redes sociales, y no ha sido hasta ahora cuando se ha pronunciado. Ha dado su primera entrevista en donde vive, Onda Vasca, y reflexiona sobre su estancia en el País Vasco y cómo se siente respecto a esto.
La prensa ha formado siempre parte de su vida desde que se diera a conocer como modelo y en su posterior relación con Kiko Rivera. Ahora, fuera de toda polémica, se siente muy segura. "Me siento cómoda si me encuentro con la prensa porque mi conciencia está super tranquila y no hay nada en mi vida que se pueda malinterpretar", aseguraba. Ya no siente miedo a las preguntas, entiende que ha sido un proceso para todos: "He madurado y crecido bajo la presión de las cámaras, he hecho mi vida al margen pero me han seguido de cerca". Siente, a pesar de la polémica con su ex pareja, estar en un buen punto con los medios: "Con el tiempo han hecho que me sienta cómoda. Me siento cuidada, siento que me respetan".
Su vida en el País Vasco, muy asentada desde 2021
Sus hijos y su empresa de eventos, Birya Studio, son su prioridad. Siente que estando en el País Vasco disfrutan de una vida más tranquila que en una ciudad más céntrica como Madrid. Es en 2016 la primera vez que pisa la ciudad vasca, embarazada de su segundo hijo. Tiempo después, tras el paso de Jota Peleteiro por un equipo inglés, toman rumbo desde Inglaterra en 2021, con el final de la pandemia, y se instala definitivamente. Se están acercando a la adolescencia de los pequeños y no sería un buen momento. Ya han establecido su vida aquí y "me ahorraría muchos disgustos, estarían más controlados, si la pasan aquí". Están interesados por el fútbol y Bilbao es un buen lugar para todos ellos.Esta entrevista en versión audio no ha sido nada que le haya costado, asegura que "no me importa hablar de mi vida mientras no se entren en temas feos". Por todo ello, para las polémicas no ha habido tiempo, sabe que es muy prudente y "cuido mucho de mi privacidad y mi burbuja". Aunque la moda sigue siendo importante, ahora es otra faceta la que ocupa su día a día. Se dió cuenta de que algo quería cambiar cuando, cuidando a su hijo mayor y con otro en camino, se había quedado su profesión por el camino. "Siempre me había quedado la espinita de querer hacer algo más. Quería sentirme realizada y hacerlo por mí, sentir que era alguien más que Jessica Mamá", explicaba muy segura. La serie de 'Las chicas Gilmore' la inspiró mucho a tomar un nuevo rumbo.
"Me gustaría hacer programas como 'El Desafio', 'Mask Singer'..."
La verdadera revolución en cuanto a la imagen pública de Jessica Bueno fue su participación en la edición de 2011 de 'Supervivientes'. Ahí fue donde conoció a Kiko Rivera y comenzó su historia de amor. Cuenta que en ese momento no se sintió muy preparada del todo pero que participó porque "siempre había visto ese programa y en mi edición todavía había anónimos". Aunque se lo planteó como un reto, ahora siente que se arrepiente en cierta forma: "Aguanté los tres meses porque tengo mucho amor propio". La Jessica Bueno de 2023, de hecho, ni se lo plantea: "Ahora no haría ese tipo de televisión, no sirvo para eso. Creo que nadie me vió porque huía de las cámaras". De tener que plantearse volver a la televisión sería con un formato que le permitiera hacer algo. "Hoy en día no haría nada tipo reality, pero sí me gustarían programas más de hacer cosas como 'El Desafio' o 'Mask Singer'", reflexionaba. Ante la posibilidad que le planteaba el presentador de postularse para 'MasterChef Celebrity', que auna las dos cosas, no lo ha dudado ni un segundo. "Me gusta cocinar y se me da bien. Ahora, no sé cómo cocinaría bajo presión", pensaba en ese momento.