Javier Tudela está pasando un verano, como mínimo, muy diferente. El hijo de Makoke se veía obligado a hacer un alto en sus vacaciones en familia para pasar por el quirófano a consecuencia de una tendinitis. Aquejado de dolores que arrastraba desde hace tiempo, finalmente, fue intervenido del tobillo y dado de alta al día siguiente. El propio Javier explicaba cómo estaba afrontando el post operatorio en sus redes y confesaba que lo estaba pasando fatal. Muy comprometido con su pronta recuperación, ha tenido que volver al hospital a causa de una complicación que le estaba generando muchas molestias.
Javier Tudela y su complicada recuperación
El parte de tranquilidad es que ya está en casa, de nuevo en absoluto reposo y atendido por los suyos. El concursante de 'Vaya vacaciones' ha compartido con sus seguidores, algo más de 127.000 en Instagram, este pequeño contratiempo que le ha llevado de vuelta al centro hospitalario. En el vídeo se le ve sonriente, haciendo gala de mucha resignación, la sensación que le invadiría a cualquiera que acaba de pasar por quirófano."Hemos tenido una pequeña complicación. He tenido que ir al hospital otra vez porque me estaban saliendo unas heridas en la pierna por el tema de la venda. Pero aquí estamos", ha explicado ya desde el sofá. Junto a él, su inseparable pareja, Marina Romero. De fondo, se podía escuchar a Javier, el hijo que ambos tienen en común, de apenas dos añitos.
No se descarta que tenga que volver a ser operado
Marina está siendo el principal apoyo del 'influencer' en estos complicados momentos. Su relación va viento en popa a tenor de las publicaciones que ambos se dedican en redes, donde su complicidad es evidente. La sevillana es la encargada de atender a su chico ahora que apenas puede moverse. Tanto es así que es ella quien 'saca', literalmente, a Javier cuando este quiere salir a la calle. Así lo han reflejado en otra de sus publicaciones, donde se les ve dando un paseo nocturno, él sentado en una silla de ruedas y Marina empujándole desde atrás.La pareja se ha armado de mucha paciencia. No les queda otra para hacer frente a esta situación delicada. Como explicó el hijo de Makoke tras la operación, la recuperación de su tobillo va a ser lenta. De hecho, no se descarta que tenga que volver a ser intervenido una segunda vez. Javier se lesionó practicando muay thai, una disciplina muy exigente que aprendió durante su viaje a Tailandia. Requiere de mucha técnica y preparación para poder poner en práctica los movimientos que comprende. Esperamos que el pequeño contratiempo de Javier Tudela sea solo eso y pueda retomar poco a poco su vida normal alejado de los médicos.