Gina Lollobrigida falleció el pasado 16 de enero en Roma a los 95 años. Con un estado de salud delicado, la actriz no pudo superar el último ingreso hospitalario que vivió. Javier Rigau, viudo de la misma, lleno de rabia, ha intervenido en 'Sálvame' para exponer qué podría haber sucedido realmente. Con el paso del tiempo Rigau ha recopilado información y desvela que, al parecer, cuando llegó al centro médico en esa última hospitalización "ingresó desnutrida, deshidratada, con una llaga sangrante y los riñones a cero".
Tiene claro que el secretario que acompañaba a la actriz en esos últimos meses de vida no estuvo tan pendiente como se debería. No logra entender cómo, siendo ese su estado, no se tomó medidas antes: "No se podía dejar a una persona de esta manera. Se podía haber ingresado antes, ¿no?". Durante mucho tiempo intentaron tener acceso a la actriz, a su domicilio, y así poder ayudarla. Él mismo se ofreció a facilitarle acceso a enfermeras si eso era lo que verdaderamente se necesitaba. Esto, al final, fue una misión imposible cada vez que lo intentaron. Ejemplificaba todas estas dificultades desvelando qué sucedió una de las ocasiones que se acercaron a la vivienda.Todo esto, a lo que calificó como "gordísimo", provocaba situaciones complicadas: "No hemos podido entrar en la casa porque estaba todo cerrado con cinco perros". Tras valorar realmente lo grave de todo lo que sucedía, intentaron por todos los medios evitarlo, pero fue imposible. Todo les dirige a pensar que se encontraban ante una situación ya conocida en "que personas que no están al 100%, están machacadas mentalmente por gente que la pone en contra de la familia" con el solo objetivo de "depredarlas".
"Llevamos desde el 2010 luchando para salvar a Gina del sinvergüenza de su secretario"
La situación ha saltado por los aires tras conocerse, finalmente, cuál ha sido el resultado de la herencia de Gina Lollobrigida. Javier Rigau explicaba cómo estaba siendo "una sorpresa detrás de otra" después de comprobar que el hijo tenía la legítima el y el llamado secretario el resto. Las sospechas que ambos tuvieron durante años sobre el destino de la gran fortuna que había conseguido como estrella internacional se confirmaban. Se lamentaban porque los últimos días hubieran sido así y, lleno de rabia y enfado, exponían que llevaban desde 2010 en diversos procesos judiciales. El hecho de que no hayan podido conseguir algo en ese tiempo le trae de cabeza: "No hemos llegado a nada, tiene procedimientos judiciales por todas las vías".Más claro aún ha dejado que han hecho todo lo que han podido con los tiempos que todos estos exigen: "La justicia funciona pero, en muchos casos como este, no ha llegado". Así, confiesa que todo comienza porque "el hijo único de Gina, que es más bueno que el pan, quiso ir por la justicia. Si llego a estar yo al tío este...No hemos llegado a nada". Quedan aún muchas pruebas que presentar y detalles que aclarar. Todo apunta a que ya estarían en el procedimiento: "Ahora por notario se va a recomponer el patrimonio". Todo le lleva a pensar que, las cosas que no aparecen, puedan estar ubicadas en otra parte. A pesar de todo esto quiere mandar un mensaje. Tiene claro que el brillo de la figura de Gina Lollobrigida y lo que fue no se puede ver apagado por todo esto. Pide "que se recuerde a Gina como era antes de sus últimos doce meses donde, señala, "era víctima de la persuasión de la mente".