"Tengo suficiente con los problemas que tengo para que me hagáis culpable de un problema entre madre e hijo", ha comenzado a decir enfadada la joven.

Este sábado, Kiko Rivera ha entrado en directo en 'Viva la vida' y se ha abierto en canal con el programa de Telecinco. El hijo de Isabel Pantoja ha desvelado que debido a estas fechas tan señaladas ha intentado ponerse en contacto con la tonadillera a través de terceras personas y esta le ha dejado claro que no quiere saber nada de él porque "ya no somos familia". Después de hablar sin filtros y dar el último parte acerca del conflicto familiar, Irene Rosales se ha hartado de los mensajes en los que la la culpan de la guerra entre madre e hijo y ha lanzado un contundente mensaje a través de sus redes sociales.

Irene Rosales, harta, manda un mensaje a los que le acusan de ser la culpable de la guerra de los Pantoja
© Redes sociales

Visiblemente enfadada, Irene Rosales ha utilizado sus historias de Instagram para hacer público que está recibiendo varios mensajes, sobre todo de mujeres, en los que le acusan de ir hablando poco a poco atacando a la tonadillera. "No tengo ninguna patita ni para esconder ni para enseñar. Tengo suficiente con todos los problemas que tengo para que me hagáis culpable a mí de un problema entre madre e hijo. En esta historia lo único que pinto es que soy la mujer de Kiko y que estoy con él 24 horas y siempre lo voy a estar, tanto para lo bueno como para lo malo", comienza a defenderse.

Por otro lado, Irene Rosales también ha querido dejar claro que forma parte de su trabajo como colaboradora de televisión hablar y opinar sobre todos los temas que le ponen sobre la mesa. Aunque es consciente de que siempre va a poner limites y va a contar lo que quiera y hasta dónde pueda. "Eso no significa que esté enseñando una patita. Sigo siendo la misma de siempre, con educación. Y me dirijo a todo el mundo con respeto, jamás he vendido a nadie", asevera. La mujer del DJ insiste en que está centrada en vivir una vida feliz junto a su familia, sus dos hijas y su marido: "Voy a seguir viviendo mi vida como yo quiero sin hacer daño a nadie. Quien quiera seguir criticando está en todo su derecho, pero para mí sois personas infelices", sentencia.

Irene Rosales se desmarca de los Pantoja

Irene Rosales, harta, manda un mensaje a los que le acusan de ser la culpable de la guerra de los Pantoja
Montaje SEMANA

Irene Rosales se ha sincerado al comienzo de 'Viva la vida' y ha reconocido que a pesar de haber perdido a sus dos padres este mismo año, ha intentado pasar lo mejor que ha podido estas fechas tan especiales por el bien de sus hijas. Además, ha dejado claro que cada día que pasa ve más triste a su marido, Kiko Rivera, a raí­z de su guerra abierta con la tonadillera. Sin embargo, se ha mostrado muy clara y ha incidido en que prefiere mantenerse al margen y no quiere saber nada del conflicto.

"No quiero saber nada más... Si mi cuñada habla con su madre yo no quiero saber nada. No sé qué no entendéis. No es que no quiera hablar, es que no quiero saber. En la cena de Nochevieja no se habla nada de la madre porque estaban dos de mis hermanos y ahí­ no hay nada de conversación de ella. Isa estaba triste pero alegre y Asraf estaba muy bien. Los dos encantadores, nos ayudaron a todos", explicaba la colaboradora de 'Viva la vida' y comenzaba a enfadarse después de los ataques de José Antonio Avilés.

La mujer de Kiko Rivera volví­a a insistir en que a pesar de los insultos de Asraf hacia la familia Pantoja dentro de 'La casa fuerte' a ella no se daba por aludida porque "soy Rosales Vázquez, que no se le olvide a nadie". "La relación entre Kiko y Asraf fue buenísima, ellos hablaron sin ningún problema. Kiko ha dicho que no se va a meter en la relación de su hermana", prosigue. Tras esto, la que fuera concursante de 'GH DÚO' insiste en que su marido y su cuñada hablaron dos dí­as antes del encuentro que tuvo la de 'El programa de Ana Rosa' con la tonadillera. "Después de esa conversación encuentro a Kiko cada día un poco peor, hubo algo que no le gustó. Él no está bien, está triste", sentenciaba la joven.