Kiko Rivera sigue dentro de la casa de 'GH DÚO', lo que significa que ha sido su mujer, Irene Rosales, la que se ha tenido que ver las caras con Las Mellis por la demanda que el dj les interpuso hace unos meses.
Irene Rosales defiende el honor de Kiko Rivera
Duras acusaciones
Fue Bibi la que desveló en el programa presentado por María Patiño que Kiko Rivera se le había insinuado cuando ya estaba con su mujer.
Negando sus palabras
Ante tales declaraciones, el dj decidió demandar a la pareja de hermanas por haber dañado su honor, que en marzo del año pasado dijeron: “cuando vas con tu verdad no temes nada”.
Ya se han enfrentado
Este martes 9 de abril, Las Mellis e Irene Rosales han acudido al juicio, esta última en calidad de testigo.
No ha querido hablar
Visiblemente tranquila, la nuera de Isabel Pantoja ha preferido no hacer declaraciones para no afectar al juicio.
Con una sonrisa
“Perdonadme, pero no puedo decir nada. El resultado no lo sabemos aún”, ha explicado Irene en las inmediaciones del juzgado de Sevilla, a donde ha acudido sin perder la sonrisa.
Sin responder a nada
A continuación, los reporteros le han preguntado a Irene si Kiko tendría que ir a juicio, algo a lo que no ha querido responder.
No quieren seguir con la historia
Irene solo ha vuelto a abrir la boca cuando le han preguntado si no habla precisamente para no seguir dándoles juego a Las Mellis. “Puede ser”, ha sido su escueta respuesta.
Una cantidad muy alta
Kiko Rivera les reclama nada menos que 150.000 euros por vulnerar su derecho al honor.
Varias horas en el lugar
En total, Irene Rosales ha estado dos horas dentro de los juzgados. Si bien la vista comenzaba a las 11 de la mañana, ha acudido un poco antes.
Es un caso muy peculiar
El hecho de que no haya pruebas hacen que este caso sea peculiar y un tanto complicado. Aun así, ha estado una hora testificando.
Puede convertirse en un problema
Según han explicado en ‘El programa de Ana Rosa’, si Kiko Rivera perdiera el juicio se tendría que hacer cargo de las costas, lo que supondría un nuevo problema económico.
Un pacto que no llegó a ser
El citado programa ha contado también que la defensa de Rivera se habría puesto en contacto con la parte contraria para llegar a un acuerdo que no han aceptado.
Lo que quería
Al parecer, para llegar a un acuerdo, Las Mellis tendrían que haber asumido el coste de las costas y retirar la demanda, algo que su abogado les ha recomendado no hacer.
Disculpas en público
Por otro lado, también quería que le pidieran perdón por lo que dijeron.
Un testigo curioso
Eso es lo que pensaban los colaboradores de ‘El programa de Ana Rosa’ sobre el hecho de que Irene Rosales sea testigo de su marido. “¿Qué va a saber Irene si en caso de haberle sido infiel habría sido la última en enterarse?”, ha dicho Joaquín Prat.